Alemania aplica política de austeridad

Después de duras negociaciones, la coalición del Gabinete alemán aprobó un proyecto de presupuesto federal para 2024, que reducirá drásticamente los gastos tras años de subsidios especiales por la pandemia de Covid-19 y el aumento del precio de la energía.
Foto ilustrativa (Fuente: Reuters)
Foto ilustrativa (Fuente: Reuters)

El Gobierno alemán tiene que apretarse el cinturón para normalizar sus finanzas tras varios años de enorme gasto público debido a la pandemia y a las secuelas del conflicto en Ucrania.

El Gobierno del Canciller Olaf Scholz ha aprobado el proyecto de presupuesto para 2024 y el plan presupuestario hasta 2027 presentados por el Ministro de Finanzas Christian Lindner, del Partido Liberal Democrático (FDP).

El proyecto prevé un gasto de 445,7 mil millones de euros (485 mil millones de dólares) el año que viene, 30 mil millones menos que este año. Aunque se espera que el gasto disminuya, se calcula que será un 25 por ciento superior a los niveles de 2019. Se espera que el nuevo endeudamiento disminuya significativamente, de 45,6 mil millones de euros en 2023 a 16,6 mil millones de euros en 2024.

El ministro de Finanzas, Christian Lindner, del Partido Democrático Liberal (Foto: Reuters)

El ministro de Finanzas, Christian Lindner, del Partido Democrático Liberal (Foto: Reuters)

El nuevo endeudamiento está dentro de los límites permitidos por la Constitución, que limita la deuda a no más del 0,35 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

El proyecto de presupuesto se considera un paso importante hacia la reducción del déficit presupuestario, inflado por el impacto de las medidas para combatir la pandemia y la crisis energética. Aunque el borrador fue aprobado, aún quedan algunos detalles por discutir hasta agosto, como el plan de gastos a partir de 2025 para garantizar la seguridad básica de los niños o el presupuesto para el Fondo para el Clima y la Transformación.

La economía líder de Europa ha estado en recesión desde principios de 2023 debido a la inflación creciente y al alza de las tasas de interés. El Gobierno alemán ha introducido el "freno a la deuda" a partir de 2023 mediante la creación de varios fondos especiales al margen del presupuesto oficial. Se utilizarán para ayudar a hogares y empresas a hacer frente a la subida de los precios de la energía.

El ministro Lindner apreció el papel de la política de "freno de la deuda" en medio de la necesidad de armonizar las políticas monetaria y fiscal para luchar contra la inflación y evitar conflictos entre estas dos políticas y la deuda pública del país, que en el primer trimestre de 2023 marcó un récord de 2.406,6 mil millones de euros.

Según la Oficina Federal de Estadísticas de Alemania, la deuda pública del país europeo en el primer trimestre de 2023 aumentó en 38,8 mil millones de euros respecto a fines de 2022, principalmente debido al incremento de las necesidades financieras del Gobierno para hacer frente a la crisis energética.

El Ministerio de Finanzas ha establecido una política de control de los gastos presupuestarios, pero sigue priorizando los gastos en defensa. En su plan para el presupuesto federal para 2024, Lindner prevé un nuevo endeudamiento neto de 16,6 mil millones de euros debido a los gastos récord en defensa.

El Gobierno alemán se ha comprometido a cumplir en 2024 el objetivo de destinar el dos por ciento de su PIB a la OTAN, con 51,8 mil millones de euros previstos para gastos de defensa y otros 19,2 mil millones de euros para las fuerzas armadas.

Lindner subrayó que el crecimiento del gasto público debe ser inferior al de la economía y tener una base garantizada para reducir el déficit. Bajar deuda pública e invertir en innovación y defensa son objetivos clave que el Gobierno alemán se ha fijado en su próximo plan de gasto presupuestario.