La visita del dueño del Kremlin a la India se produce mientras Nueva Delhi negocia con Washington la reducción de los elevados aranceles recíprocos que Estados Unidos impone a los productos indios.
Los analistas consideran que esta gira reviste una enorme importancia simbólica y que su objetivo es reafirmar el papel de estas dos grandes potencias - una en Asia y otra en Europa - en la conformación de las tendencias de cooperación global.
Putin subrayó que la amistad ruso-india, cultivada durante siete décadas, responde a los intereses de ambos países y no está dirigida contra ningún tercer Estado.
Al término de la XXIII Cumbre India-Rusia, el primer ministro indio, Narendra Modi, y el presidente ruso, Vladímir Putin, firmaron una declaración conjunta. El documento reafirma el compromiso de ampliar y profundizar la asociación estratégica especial y privilegiada, y califica la relación bilateral de "ancla" de paz y estabilidad global.
En el documento, las partes expresan su satisfacción por los avances de la cooperación bilateral en política, defensa, energía, comercio, ciencia y tecnología, espacio y educación.
Rusia y la India se plantearon la meta de elevar el comercio bilateral de 67 mil millones de dólares a 100 mil millones en 2030, de forma equilibrada y sostenible, y acordaron ampliar el uso de monedas nacionales en sus transacciones. Modi incluso afirmó que esa cifra podría incluso alcanzarse antes.
Ambos mandatarios coincidieron en que la defensa constituye un pilar tradicional que se fortalecería merced a la adición de actividades de investigación, la producción conjunta y la transferencia de tecnología bajo el marco “Make in India”.
La Declaración Conjunta reafirma que la energía sigue siendo un elemento clave de los lazos bilaterales con una cooperación más amplia en petróleo y gas, y se menciona una cooperación más amplia en petróleo y gas, gas natural licuado, energía nuclear civil y nuevas tecnologías.
La vinculación entre Rusia y la India juega un papel importante en Asia y Europa en el sector de la energía. Según expertos, esto resulta obvio en un contexto en el que Rusia sufre un asfixiante cerco occidental en esa área, mientras la India está bajo la amenaza de la política arancelaria estadounidense.
Putin reiteró su apoyo a la candidatura de la India a un eventual Consejo de Seguridad de la ONU ampliado. Afirmó que ese será un futuro insoslayable debido a la creciente influencia global y el sólido crecimiento económico del gigante surasiático.
En el Foro Empresarial India-Rusia, Modi subrayó que la confianza mutua es una base sólida de la relación bilateral y propuso crear un “corredor comercial virtual” para conectar sistemas aduaneros y logísticos, agilizar trámites y hacer más fluido el comercio.
Putin admitió que la balanza comercial favorece a Rusia y se comprometió a aumentar las importaciones de productos y servicios indios para reducir la brecha, lo que, según afirmó, beneficiará a ambos países.
Los analistas evalúan que la visita de Putin no fue una simple actividad diplomática, sino una prueba crucial para la nueva arquitectura del poder global. Por un lado, se considera una prueba de la autonomía de la India. Por otro lado, constituye un intento de Rusia de escapar del "aro de hierro" de Occidente y, al mismo tiempo, es una oportunidad para fortalecer la alianza euroasiática en medio de una competencia estratégica cada vez mayor.
