La resolución fue liderada por Vanuatu, una nación insular que ha sido golpeada por ciclones devastadores en el Pacífico, y coauspiciada por más de 18 países de diferentes regiones, incluido Vietnam. De acuerdo con el documento, las naciones miembros de la ONU solicitaron a la CIJ que emita opiniones sobre las obligaciones de los Estados bajo el derecho internacional en la protección del medio ambiente, así como sus responsabilidades legales por causar impactos negativos del cambio climático.
Por regla general, sólo la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU tienen derecho a solicitar el asesoramiento de la CIJ sobre cuestiones jurídicas. Guterres enfatizó que, aunque las decisiones de la CIJ no son vinculantes, si representan en este caso un fuerte apoyo de los Estados miembros a la adopción de medidas más fuertes en aras de responder a los exigencias de la lucha contra el cambio climático. La opinión de la CIJ es respetada por la comunidad internacional, lo que ayuda a presionar a los países para que observen de manera más consistente sus obligaciones bajo el derecho internacional.
La comunidad internacional dispone de importantes mecanismos para responder al calentamiento global, como la Convención Marco de la ONU sobre el cambio climático y el Acuerdo de París sobre este contenido. Sin embargo, muchas de las disposiciones de estos acuerdos no son específicas, lo que conlleva a que las medidas adoptadas por los países sean insuficientes. Se espera que el asesoramiento de la CIJ aclare las responsabilidades y obligaciones de los países en la acción climática.
La CIJ es el máximo órgano jurídico internacional de la ONU. Con esta resolución, la CIJ dará por primera vez su opinión legal sobre el cambio climático, uno de los temas más urgentes y ampliamente discutidos en muchos foros regionales e internacionales. El documento, copatrocinado por 132 Estados miembros de la ONU y ratificado por 193 países, muestra el fuerte apoyo de la comunidad internacional a la responsabilidad legal en las acciones de respuesta al cambio climático.
Según el primer ministro de Vanuatu, Alatoi Ishmael Kalsakau, el texto final de la resolución es el resultado de un largo proceso de consulta y deliberación, y demuestra el deseo colectivo de trabajar para resolver la crisis climática. También destacó el importante papel de los estudiantes de Derecho en el Pacífico que inspiraron esta medida.
Al dar la bienvenida a la histórica resolución, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, resaltó que el consejo de la CIJ podría ser un catalizador importante para una acción climática urgente, ambiciosa y equitativa, contribuyendo a prevenir el calentamiento global, así como limitar y reparar los daños a los derechos humanos causados por ese fenómeno de escala global.
La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha documentado de forma completa los impactos del cambio climático en los derechos humanos y está lista para compartir información sobre las obligaciones que los países y actores deben garantizar al respecto.
Citando un nuevo informe científico publicado por el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, Guterres reafirmó que los humanos son los responsables de prácticamente todo el calentamiento de la Tierra durante los últimos 200 años. Enfatizó que este es un momento de acción climática y de hacer justicia climática. La crisis solo puede resolverse a través de una estrecha cooperación entre pueblos, culturas, naciones y generaciones, subrayó.