Economía de Reino Unido enfrenta grandes desafíos

Según el informe Perspectivas de la economía mundial del Fondo Monetario Internacional (FMI), Reino Unido es la única economía desarrollada que caerá en recesión en 2023. Los acuerdos inconclusos luego de tres años de salida de la Unión Europea (UE), la alta inflación y el mercado laboral aún no se ha recuperado después de la pandemia de Covid-19, todo lo cual ha hecho que el panorama económico de este país sea más sombrío que otros países de la región.
Ciudadanos compran en un mercado de Londres, el 15 de enero de 2021. (Foto: REUTERS)
Ciudadanos compran en un mercado de Londres, el 15 de enero de 2021. (Foto: REUTERS)

El primer ministro británico, Rishi Sunak, resaltó que el Brexit -–la salida de la UE- , ha brindado a la nación europea una gran oportunidad y le ha permitido cosechar varios importantes logros. Según el jefe de gobierno, el Reino Unido se ha allanado el camino para convertirse en un país independiente con fuertes avances, como el despliegue más rápido de la vacunación contra el coronavirus en Europa, la firma de acuerdos comerciales con más de 70 países y la recuperación del control fronterizo. El Gobierno de Londres tiene la oportunidad de cumplir sus prioridades de crecimiento, impulso del empleo y mejora de la calidad de vida de los ciudadanos, destacó.

Dicho comentario fue realizado en un contexto en que el Gobierno británico enfrenta una serie de desafíos, cuando miles de trabajadores lanzaron una ola de huelgas para exigir salarios más altos en medio de una inflación galopante y en medio de una crisis del costo de la vida que afecta a millones de personas.

Según cifras de la Oficina de Estadísticas Nacionales del Reino Unido, la economía sufrió más en términos de días laborables debido a huelgas entre junio y noviembre de 2022 que en cualquier periodo de los 30 años anteriores. La inflación de los alimentos alcanzó la cifra récord del 16,7% en las cuatro primeras semanas de 2023, según la empresa de estudios de mercado Kantar.

Mientras tanto, las negociaciones de meses entre el Reino Unido y la UE sobre el tema de Irlanda del Norte aún no llegan a su fin. Muchos expertos comparan el Protocolo de Irlanda del Norte, que es una parte importante del Brexit, con el "talón de Aquiles" en las relaciones entre las dos partes.

Según el Protocolo, el territorio británico de Irlanda del Norte sigue cumpliendo con las reglas del mercado único europeo para evitar tener que establecer una "frontera dura" con la República de Irlanda, miembro de la UE. Sin embargo, la implementación del control de carga antes de entrar a Irlanda del Norte provoca graves efectos a la circulación de mercancías. Los socios de la UE dudan en hacer negocios con empresas británicas. Muchas compañías se quejan de los bienes dañados antes de completarse el despacho aduanero.

Un portavoz del primer ministro británico afirmó que el Reino Unido y la UE no habían llegado a un nuevo acuerdo sobre el tema de Irlanda del Norte. Subrayó que todavía queda trabajo por hacer en muchas áreas, ya que subsisten diferencias significativas en las posiciones del Reino Unido y la UE. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que la UE está manteniendo un diálogo muy constructivo con el Reino Unido.

Según el análisis de Bloomberg Economics, la economía del Reino Unido está cuatro por ciento por debajo de lo que estaría si se hubiera quedado en la UE. La economía nacional perdió alrededor de 100 mil millones de libras (124 mil millones de dólares) un año después de abandonar la UE en 2020. El Brexit ha reducido 20 por ciento el valor de intercambio comercial bilateral.

Tanto el Reino Unido como la UE han sentido claramente las implicaciones del Brexit, pero este es un hecho y es el momento de que las partes se concentren en cómo eliminar los obstáculos, hacia una relación mejor en el futuro, especialmente cuando tanto el Reino Unido como la UE enfrentan desafíos impredecibles.