Inmigrantes ilegales, un tema candente en el Mediterráneo

 Según SOS Mediterranee, el buque de rescate Ocean Viking acaba de recoger a más de 600 migrantes a la deriva en el mar Mediterráneo. Desde principios de año, al menos 1.848 personas han muerto intentando llegar a Italia y Malta desde el norte de África por la ruta marítima más peligrosa para los migrantes. Detener los flujos migratorios irregulares es un tema candente y un quebradero de cabeza para los países a ambos lados del Mediterráneo.
Migrantes duermen en la cubierta del barco de rescate Ocean Viking en el Mar Mediterráneo el 6 de noviembre de 2022 (Foto: SOS Mediterranee/Reuters)
Migrantes duermen en la cubierta del barco de rescate Ocean Viking en el Mar Mediterráneo el 6 de noviembre de 2022 (Foto: SOS Mediterranee/Reuters)

El portavoz de SOS Mediterranee dijo que en la mañana del 10 de agosto, la organización rescató a 623 migrantes en 15 operaciones. La mayoría de ellos prevenían de Sudán y el resto de Guinea, Costa de Marfil, Burkina Faso, Benín y Bangladesh. Un grupo fue trasladado a la isla de Lampedusa y el resto al puerto de Civitavecchia, al noroeste de Roma, la capital italiana.

Esta es solo una de las operaciones diarias de rescate en el Mediterráneo, un "punto crítico de migración" del mundo. El número de cruces fronterizos ilegales hacia la Unión Europea (UE) en los primeros seis meses aumentó 10 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado, reveló la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas. Mientras tanto, el número de migrantes que utilizan la ruta del Mediterráneo Central para entrar ilegalmente en Europa ha superado el 30 por ciento, lo que supone más de la mitad de todas las entradas ilegales en Europa. En los últimos 10 años, más del 75% de los migrantes que han elegido esta peligrosa ruta han muerto.

Situado en el corazón de la región mediterránea, Túnez es uno de los puntos de tránsito más recurridos por los inmigrantes ilegales que entran en Europa. Aunque las autoridades tunecinas han adoptado medidas estrictas para atajar el problema, el número de cruces irregulares de Túnez a Italia, principal destino de los solicitantes de asilo en el continente, sigue aumentando. Unos 93 mil 700 personas llegaron a Italia por mar en lo que va de 2023, frente a los 44 mil 700 del mismo período del año pasado. Mientras tanto, según funcionarios marroquíes, que también es un punto de partida para inmigrantes de África del Norte, se evitaron 26 mil casos de migración irregular en los primeros cinco meses.

El número de cruces fronterizos ilegales hacia la Unión Europea (UE) en los primeros seis meses aumentó 10 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado, reveló la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas.

Tras los frecuentes naufragios en el Mediterráneo, las agencias de la ONU pidieron una ruta segura para los migrantes y solicitantes de asilo que se dirigen a la UE. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) insistió en la necesidad de gestionar mejor los flujos migratorios. También advirtió de que la tragedia del Mediterráneo se repetiría si los países no hacían más por coordinar las operaciones de rescate en el mar. ACNUR, la Organización Internacional para las Migraciones y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia han estado promoviendo un enfoque más unificado de las operaciones de búsqueda y rescate de migrantes. Estas agencias han estado trabajando con las autoridades locales de Lampedusa para ayudar en la fase inicial de desembarco y recepción. Las agencias de la ONU también han destacado el mayor riesgo que corren los migrantes que intentan la travesía marítima en condiciones meteorológicas adversas y han denunciado a las organizaciones de contrabandistas.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) insistió en la necesidad de gestionar mejor los flujos migratorios. También advirtió de que la tragedia del Mediterráneo se repetiría si los países no hacían más por coordinar las operaciones de rescate en el mar.

Los países del Mediterráneo, Oriente Medio y África intentan encontrar formas de reducir la migración ilegal reduciendo drásticamente el tráfico de seres humanos y persuadiendo a la gente para que no abandone sus países de origen y se dirija a Europa. Los países con grandes flujos migratorios, principalmente en África, han pedido a las partes interesadas que compartan la carga y la responsabilidad de gestionar la migración masiva. La UE y Túnez firmaron un acuerdo para impedir la entrada de inmigrantes ilegales. La UE y varios países africanos también acordaron abordar las causas profundas del problema de la migración ilegal mediante proyectos de financiación del desarrollo, erradicación del hambre y mitigación de la pobreza.

Se han intensificado los esfuerzos para frenar el flujo migratorio, pero el número de tragedias en el Mediterráneo sigue siendo alarmante. Esta sigue siendo una cuestión candente que debe abordarse con urgencia.