El ministro del Interior de Malasia, Hamzah Zainudin, dijo que la decisión persigue el objetivo de garantizar la seguridad nacional al más alto nivel.
Agregó que las autoridades recibieron instrucciones hace más de un mes para aumentar la seguridad en los puntos fronterizos después de que el Gobierno decidiera reabrir la frontera.
Simultáneamente, las autoridades de Malasia reforzaron el control fronterizo para limitar las actividades de contrabando, especialmente el tráfico de drogas. En consecuencia, los infractores serán severamente castigados por la ley.