La IA ha crecido a gran velocidad y está revolucionando muchos ámbitos de la vida. Sin embargo, muchas de sus aplicaciones se están utilizando para difundir imágenes falsas y desinformación.
El líder de la mayor organización internacional advirtió que las nuevas plataformas tecnológicas como la IA están exacerbando la incitación al odio y la desinformación en línea, alimentando así los conflictos, la violencia y la destrucción.
Los reguladores de todo el mundo buscan con urgencia formas para lidiar con las posibles consecuencias negativas de la IA sin ahogar el desarrollo y la innovación.
El Parlamento Europeo votó el jueves a favor de negociar la adopción de la primera normativa mundial sobre sistemas de IA para limitar los daños potenciales sin ahogar la innovación.
La normativa garantizará que la IA desarrollada y utilizada en Europa respete requisitos como la supervisión humana, la seguridad, la privacidad, la transparencia, la no discriminación, el bienestar social y la protección del medio ambiente.
También clasificará y regulará los sistemas de IA en función del nivel de riesgo que planteen las aplicaciones para la salud y los derechos humanos en ámbitos clave como la educación, el empleo, la seguridad, la migración y las infraestructuras.
Si el PE y los 27 estados miembros de la UE llegan a un acuerdo con respecto a la IA a fines de año, el bloque europeo tendrá el primer marco jurídico integral para limitar los posibles excesos de esta rama tecnológica.
El presidente francés, Emmanuel Macron, pidió a la UE acelerar la adopción de las regulaciones sobre la IA. El mandatario subrayó que el fortalecimiento de la gestión del sector debe ir de la mano de incentivos a la inversión para maximizar su potencial. También anunció que su gobierno destinará 500 millones de euros en financiación suplementaria para el desarrollo de la IA en su país.
Mientras, el primer ministro británico, Rishi Sunak, anunció que su país acogerá la primera cumbre mundial sobre la IA para limitar los riesgos a la humanidad, durante una visita a Washington para estrechar lazos con el gobierno estadounidense.
Estados Unidos también se sumó a la ola regulatoria y el Congreso propuso dos proyectos de ley relacionados con la IA. El primero obliga a los organismos gubernamentales a informar a los usuarios cuando se utilice IA para interactuar con ellos. También postula que esos organismos deben crear un mecanismo para que los ciudadanos puedan apelar las decisiones tomadas por la IA.
El otro proyecto de ley propone crear un organismo para garantizar que el país norteamericano siga manteniéndose a la cabeza en el desarrollo de esta tecnología emergente.
Las empresas tecnológicas también advirtieron de las consecuencias impredecibles de utilizar la tecnología para malos fines y desarrollarla en la dirección equivocada, y pidieron a los reguladores de la IA que ultimen pronto una normativa para supervisarla.
Sam Altman, director operativo de la empresa OpenAI, creadora de la inteligencia artificial ChatGPT, indicó que las herramientas de la IA aún presentan habilidades rudimentarias en comparación con lo alcanzables en el futuro. Propuso crear un ente internacional encargado de vigilar el cumplimiento de estándares de seguridad en el desarrollo de las aplicaciones de esta tecnología.
La propuesta ha recibido el apoyo del secretario general de la ONU y líderes de muchos países. Guterres enfatizó que las plataformas digitales nacieron sin una evaluación completa de los riesgos potenciales para la sociedad y las personas, por lo que esta es una oportunidad para que el mundo aprenda sobre los errores del pasado.
