Movimientos impredecibles de los precios del “oro negro”

Los precios mundiales del petróleo se han mostrado volátiles últimamente, con una fuerte caída la semana pasada como consecuencia de las noticias negativas sobre la crisis bancaria y el aumento de las existencias de crudo en Estados Unidos. Sin embargo, los analistas predicen que el precio del "oro negro" subirá en el segundo semestre de este año y advierten de que prepararse para esta situación es una necesidad inmediata para todas las economías.
Tanques de petróleo de la petrolera estatal venezolana PDVSA, en una instalación petrolera, en Lagunillas, 14 de octubre de 2022. (Foto: Reuters)
Tanques de petróleo de la petrolera estatal venezolana PDVSA, en una instalación petrolera, en Lagunillas, 14 de octubre de 2022. (Foto: Reuters)

El petróleo cae con fuerza ante el desplome de las acciones bancarias

El petróleo acumuló dos sesiones consecutivas de depreciación la semana pasada. Al cierre de la sesión del pasado 24 de marzo, el precio de los futuros de crudo Brent para entrega bajó 92 centavos, o un 1,2 por ciento, para situarse en 74,99 dólares por barril. Mientras, los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) cayeron 70 centavos, o 1,0 por ciento, a 69,26 dólares el barril. Ambos puntos de referencia cayeron simultáneamente, ubicándose en su nivel más bajo en los últimos 15 meses.

Los analistas atribuyen esta subida a los impactos de la reciente crisis bancaria en EE.UU. y Europa. Explicaron que los comerciantes están cada vez más preocupados por las turbulencias del sector financiero de la mayor economía mundial y del Viejo Continente, las cuales puedan oscurecer las perspectivas económicas y afectar la demanda de energía.

Junto con la caída de los precios del petróleo, las acciones bancarias se desplomaron en Europa con el derrumbe del banco alemán ​​Deutsche Bank y el gigante bancario suizo UBS, atemorizados porque los peores problemas que afectaron al sector desde la crisis financiera de 2008 aún no se han contenido. Es probable que la volatilidad persista esta semana, y que las preocupaciones más amplias del mercado financiero permanezcan a la vanguardia, según analistas de ING Bank.

El mercado no se mueve por los fundamentos de la oferta y la demanda, sino por las preocupaciones bancarias, dijo Phil Flynn, analista de la firma financiera Price Futures Group. La depreciación del "oro negro" también se debe a la preocupación generada por el aumento de las existencias petroleras, después de que la secretaria de Energía de ese país, Jennifer Granholm, dijera que rellenar la Reserva Estratégica de Petróleo podría llevar varios años, frenando las perspectivas de la demanda.

Granholm dijo a los legisladores que sería difícil aprovechar los bajos precios de este año para aumentar las reservas, que actualmente se encuentran en su nivel más bajo desde 1983, tras las ventas ordenadas por el presidente Joe Biden el año pasado. Sin embargo, muchos economistas creen que esta caída no durará mucho tiempo y que el precio del petróleo podría subir en la segunda mitad del presente año.

La fuerza impulsora del aumento de los precios del petróleo es la recuperación de la economía de China y del mundo después de la pandemia de Covid-19. El gigante asiático prevé un crecimiento económico del cinco por ciento este año tras el abandono de su política de 'cero Covid' y la reapertura de sus fronteras. Según el banco estadounidense Goldman Sachs, la demanda de materias primas está creciendo en el mayor importador de petróleo del mundo hasta alcanzar los 16 millones de barriles por día (bpd).

La Agencia Internacional de Energía dijo que China representa casi la mitad del aumento de dos millones de bpd en la demanda mundial de petróleo, que podría superar la oferta después de los primeros seis meses del año. La demanda petrolera también aumentará a nivel mundial, pues de acuerdo con el último informe mensual de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), crecerá en dos millones 320 mil bqd.

Flexible adaptación a los altibajos del mercado

Otro factor que podría encarecer el petróleo, incluso a corto plazo, es el recorte de la producción por parte de los países exportadores. Tres representantes de la OPEP y sus aliados (OPEP+), acordaron reducir el bombeo en dos millones bpd hasta finales de año.

La depreciación del crudo es un problema compartido por la mayoría de los países miembros de la OPEP+, debido a su dependencia de los ingresos derivados del petróleo. El grupo anunció en octubre de 2022 recortar la producción en dos millones bpd, con vigencia desde noviembre de 2022 hasta finales de 2023, a pesar de los llamados de los principales países consumidores para aumentar la explotación.

El viceprimer ministro ruso, Alexander Novak, declaró que Rusia mantendrá un recorte de la producción petrolera de 500 mil bpd hasta finales de junio próximo. La OPEP+ planea continuar implementando el acuerdo petrolero alcanzado a fines de 2022 para este año, reforzando las señales anteriores del grupo.

Con anterioridad, en declaraciones a la prensa al margen de la Semana de la Energía de la India, el secretario general de la OPEP, Haitham Al Ghais, dijo que el organismo avanza en la dirección correcta, en referencia a la decisión tomada en diciembre de recortar la producción. Después de la reunión sostenida en febrero pasado, el grupo decidió mantener recortada su oferta de petróleo hasta el cierre de 2023. Según el funcionario, la OPEP tiene la confianza suficiente para tomar decisiones apropiadas, así como para responder de manera oportuna a uno de los sectores más volátiles.

Una reciente encuesta de Reuters reveló que el mercado petrolero mundial entrará en déficit debido a una caída en el suministro de Rusia y un incremento de la demanda de China. También pronosticó que el precio del petróleo se acercará a los 90 dólares por barril en la segunda mitad de este año.

Los 49 economistas y analistas encuestados prevén que los precios del crudo Brent alcance una media de 89,23 dólares por barril en 2023, por debajo de los 90,49 dólares registrados en enero, pero mucho más alto que el nivel actual. Mientras, el precio del WTI promediará 83,94 dólares por barril. Según Alexandr Diúkov, director general de la productora rusa Gazprom Neft, los precios del petróleo oscilarán entre 80 y 110 dólares por barril en 2023.

La fuerte volatilidad en los precios del petróleo, considerado la "sangre vital" de la economía durante muchos años, y las previsiones antes mencionadas reflejan en parte las dificultades y la inestabilidad de la economía mundial. Esta realidad requiere estrategias a largo plazo y planes flexibles a corto plazo para adaptarse a las fluctuaciones del mercado petrolero en el futuro cercano.