Por una paz duradera en Irlanda

El primer ministro británico, Rishi Sunak, acudió personalmente al Aeropuerto Internacional de Belfast para dar la bienvenida al presidente estadounidense, Joe Biden, cuando el Air Force One aterrizó en la capital de Irlanda del Norte. La visita del mandatario  se produjo en ocasión del 25 aniversario del Acuerdo del Viernes Santo, que puso fin a décadas de enfrentamientos en ese territorio.
El primer ministro británico, Rishi Sunak, llegó personalmente al Aeropuerto Internacional de Belfast para recibir al presidente estadounidense, Joe Biden. (Foto: AFP/VNA)
El primer ministro británico, Rishi Sunak, llegó personalmente al Aeropuerto Internacional de Belfast para recibir al presidente estadounidense, Joe Biden. (Foto: AFP/VNA)

El líder estadounidense aprovechó la ocasión para expresar su apoyo a la paz y los beneficios generados por las reglas comerciales posteriores al Brexit (la salida del Reino Unido de la Unión Europea), incluido el acceso de Irlanda del Norte a los mercados del Reino Unido y del bloque continental.

Firmado el 10 de abril de 1998 por los gobiernos británico e irlandés, y aceptado por la mayoría de los partidos políticos norirlandeses, el Acuerdo del Viernes Santo, con Estados Unidos como mediador, marcó el fin de tres décadas de violencia en Irlanda del Norte.

El tratado sentó las bases para una paz duradera en la isla de Irlanda, poniendo fin a uno de los conflictos europeos más graves del siglo XX que dejó más de tres mil 600 muertos.

También permitió establecer un gobierno de poder compartido en el área de Stormont, en Belfast, compuesto por los unionistas probritánicos que deseaban permanecer en Reino Unido y los nacionalistas pro-irlandeses partidarios de una reunificación con Irlanda.

Sin embargo, la situación en la isla se ha vuelto tensa tras la salida del Reino Unido de la UE en enero de 2020. El territorio carece de gobierno desde febrero del año pasado debido al boicot del Partido Unionista Democrático (DUP), la mayor agrupación protestante pro-británica, al reparto de poder, en protesta por las reglas comerciales post-Brexit aplicadas al territorio británico.

Con anterioridad, Londres declaró que no renegociaría el acuerdo del Brexit. Sunak afirmó que el Acuerdo Marco de Windsor, un nuevo pacto sobre las normas comerciales posteriores al Brexit en Irlanda del Norte, ha resuelto muchos problemas, pero el DUP afirmó que se necesitan reajustes para defender la posición de Irlanda del Norte dentro del Reino Unido.

El premier británico pidió mayores esfuerzos para restaurar el gobierno de poder compartido en Irlanda del Norte. Dijo que quiere trabajar con el gobierno irlandés y los partidos norirlandeses para garantizar que las instituciones en el territorio vuelvan a funcionar lo antes posible.

A su vez, el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, se comprometió a colaborar con su homólogo británico para restaurar el poder compartido en Irlanda del Norte con la esperanza de romper el bloque político en la región en los próximos meses.

La tensión en Irlanda del Norte llevó a la agencia de inteligencia británica MI5 a elevar a “severo” el nivel de alerta por terrorismo en el territorio. En vísperas de la visita de Biden, la policía reforzó su presencia en las calles de la capital norirlandesa.

Un día antes de la llegada del presidente estadunidense, agentes policiales fueron atacados por jóvenes encapuchados en Londonderry, la segunda mayor ciudad norirlandesa. Alrededor de 20 cócteles Molotov fueron lanzadas contra un vehículo policial blindado en Creggan, un área considerada la capital de los disidentes pro-república de Irlanda del Norte.

La policía municipal informó el martes pasado que había encontrado cuatro presuntas bombas caseras en el cementerio local.

La visita de Biden se produce después de que el Reino Unido y la UE alcanzaran el Marco de Windsor, a través del cual el gobernante estadounidense pretende impulsar el gran potencial económico de Irlanda del Norte.

El jefe de la Casa Blanca enfatizó la importancia de la estabilidad a largo plazo en esa región a través del acuerdo de paz de 1998 y el Marco de Windsor y valoró que el último es un paso importante para consolidar la paz en Irlanda del Norte.

Por su parte, el exprimer ministro británico, Tony Blair, y su ex homólogo irlandés, Bertie Ahern, quienes jugaron un papel clave en la firma del Acuerdo del Viernes Santo, señalaron que se necesita un nuevo impulso para acabar con el estancamiento en esa región profundamente dividida.

Mientras, Sunak dijo que este es el momento de redoblar los esfuerzos para traer una paz duradera al territorio británico.

En un esfuerzo por calmar la situación, el líder británico quiere unirse al presidente estadounidense para asegurar el acceso norirlandés a los mercados del Reino Unido y de la UE después del Brexit, a fin de convertir a esa región en un destino comercial atractivo.