En el contexto de los esfuerzos de Europa por reducir su dependencia de los suministros energéticos de Rusia y el progreso en el mercado de la energía en los últimos meses, especialmente en el "viejo continente", demuestra una vez más el papel crucial de las energías renovables en la mejora de la seguridad energética, además de contribuir a la reducción de emisiones.
A pesar de la escasez de suministros, los retrasos en la construcción y el aumento de los precios de los materiales, se logró un récord de 295 gigavatios de capacidad de electricidad renovable en 2021.
La AIE espera que el mundo produzca 320 gigavatios adicionales de electricidad renovable este año, equivalente a toda la demanda de electricidad de Alemania o la capacidad total de electricidad de la Unión Europea (UE) producida a partir de gas natural.
Se evalúa la capacidad adicional de energía renovable para 2022 y 2023 para reducir significativamente la dependencia de la UE del gas ruso en el sector eléctrico. Sin embargo, la contribución real dependerá del éxito de las medidas de eficiencia energética para mantener bajo control las necesidades de la región.
En el contexto de futuras crisis de suministro de energía y el esfuerzo global para combatir el cambio climático, las Naciones Unidas (ONU) publicó un plan de acción cuyo objetivo es proporcionar energía limpia y asequible para todos en 2030.
El portavoz del secretario general de la ONU, Stephane Dujarric, destacó que dicho proyecto establece una agenda de acción común a fin de lograr los compromisos asumidos en el Diálogo de Alto Nivel sobre Energía en septiembre de 2021, que incluyen aumentar el acceso a la electricidad de 500 millones de personas, garantizar a mil millones de personas más métodos de cocina limpios y la creación de 30 millones de empleos en energía renovable y eficiencia energética para 2025.
La energía limpia y asequible para 2030 se considera clave para abordar la emergencia climática y lograr cero emisiones netas en 2050. Mientras tanto, el enviado especial para el Clima de la Casa Blanca, John Kerry, resaltó que el conflicto en Ucrania muestra que es hora de acelerar la transición hacia un futuro de fuentes de energía limpias e independientes.
Al implementar un plan con el fin de acelerar la transición ecológica de la UE y reducir la dependencia del combustible ruso, la Comisión Europea (CE) propondrá algunas regulaciones que requerirán a los países designar ciertas localizaciones terrestres o marítimas aptas para el aprovechamiento de energías renovables. Estos sitios deben evitar áreas de conservación o rutas de migración de aves, prefiriendo áreas con infraestructura desarrollada, como carreteras, vías férreas, parques industriales y terrenos públicos circundantes.
A través de la nueva normativa, la CE destacó el importante papel que juegan las fuentes de energías renovables en la lucha contra el cambio climático, la reducción de los precios de la energía, la dependencia de la UE de los combustibles fósiles y la garantía de la seguridad de suministro para el bloque.
En América, Colombia inauguró la planta solar La Loma, el mayor proyecto fotovoltaico jamás realizado en este país sudamericano con una capacidad de diseño de más de 180 megavatios. Con una inversión de 126 millones de dólares y que incluye más de 400 mil paneles solares, se espera que la obra haga una contribución significativa a la red eléctrica nacional y cree cientos de puestos de trabajo para los pobladores de las zonas rurales del Paso del Norte, donde se ubica la fábrica. Colombia está decidida a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 51 por ciento para 2030 y convertirse en un país carbono neutral para 2050.
En Oceanía, el primer ministro australiano, Scott Morrison, anunció una inversión de 158 millones 400 mil dólares para desarrollar una industria de energía limpia y aumentar el almacenamiento de carbono en Australia Occidental. De eso, alrededor de 100 millones 800 mil dólares se utilizaron para expandir dos centros de producción de hidrógeno, incluido el centro de Pilbara en el norte de Australia Occidental y Kwinana en la ciudad de Perth.
Una nueva red de acción energética que conecta a los gobiernos que buscan apoyo para objetivos de energía limpia con empresas prometió más de 600 mil millones de dólares con el fin de apoyar esos esfuerzos. El director ejecutivo de la AIE, Fatih Birol, hizo un llamado a los gobiernos para que promuevan la concesión de licencias y lancen iniciativas para una implementación más rápida de proyectos de energía renovable, en el contexto de que la diversificación del suministro de energía y la transición a la energía limpia son la tendencia inevitable del futuro.