El mundo está lidiando con una "tormenta de precios" debido al impacto multidimensional del conflicto en Ucrania, la pandemia de Covid-19 y el cambio climático. Cientos de millones de personas no tienen suficiente capacidad financiera para comprar alimentos esenciales.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estimó que hasta mayo de 2022, más de 200 millones de personas en el mundo han caído en la pobreza y esa cifra aumentará debido a la grave sequía en África oriental y el llamado Cuerno africano.
La alta inflación, la tensión geopolítica y el aumento de la tasa de interés están reduciendo las perspectivas de desarrollo económico mundial. La ONU rebajó su pronóstico del crecimiento al respecto en 2022 del cuatro al 3,1 por ciento. Los resultados del sondeo realizado por S&P Global muestran que las actividades en los establecimientos de negocios en Estados Unidos, la Eurozona, Reino Unido y Australia ralentizan en mayo debido al aumento de los precios.
Las fábricas en las grandes economías están enfrentándose a la interrupción de las cadenas de suministro, debido al aumento de los casos del Covid-19 en algunos países, el conflicto en Ucrania, y los aumentos de los precios del combustible, y de los salarios para sus trabajadores, entre otros factores.
Según las estimaciones del PNUD, un total de 80 países en el mundo se enfrentan a una crisis de deuda en 2022. Este riesgo también conducirá rápidamente a la inestabilidad política, cuando las personas no tengan suficientes dinero para comprar alimentos y los gobiernos no puedan asegurar su suministro al mercado.
Steiner informó que además de Sri Lanka, América Latina y África experimentan una situación similar por la escalada de los precios. Precisó que alrededor de 60 a 70 países enfrentan las tres crisis al mismo tiempo.
El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que los conflictos siguen siendo el principal factor del aumento de la pobreza global. El mundo está experimentando “una tormenta perfecta” del conflicto, aparejado al cambio climático y la pandemia de Covid-19. El suministro de alimentos será una gran preocupación el próximo año si no se enfocan en aumentar la producción, estabilizar los mercados y resolver la crisis alimentaria mundial.
La Asamblea General de la ONU aprobó la resolución que llama a la acción global para reducir el impacto de la actual crisis de seguridad alimentaria. El documento convoca a la comunidad internacional a apoyar a los países afectados a través de acciones coordinadas como el suministro de alimentos, apoyo financiero y la diversificación de la producción agrícola.
La comunidad internacional, incluidos el Grupo de los Siete y el de los 20, debe considerar la seguridad alimentaria global como una prioridad vital en las agendas de trabajo y buscar maneras de solucionar las crisis.