Australia por convertirse en superpotencia en energía limpia

El líder del Partido Laborista Australiano (PLA), Anthony Albanese, fue juramentado primer ministro de Australia luego de lograr una victoria impresionante en las elecciones federales. Comprometido a brindar un mejor futuro al país, incluido un efectivo enfrentamiento al cambio climático, el PLA encara muchos desafíos en el camino de convertir a Australia en una “superpotencia de energía limpia”.

El nuevo primer ministro de Australia, Anthony Albanese (Foto: Reuters)
El nuevo primer ministro de Australia, Anthony Albanese (Foto: Reuters)

El partido de Albanese logró 75 escaños en la Cámara de Representantes. El nuevo Gobierno australiano debe solucionar una serie de desafíos surgidos en los últimos años. En especial, los impactos de la pandemia del Covid-19 han provocado el aumento de costo de vida, la inflación, el crecimiento de las tasas de interés y el récord de las deudas nacionales.

Según datos oficiales, en el primer trimestre de 2022 la tasa de inflación aumentó un 5,1 por ciento, la cifra más alta desde 2001. En ese tiempo también el Índice de Precios al Consumidor registró el nivel más elevado que nunca, básicamente debido a los altos impuestos sobre los bienes y servicios (GST). La economía australiana debe ser objeto de nuevas reformas para crear una fuerza motriz capaz de propiciar la recuperación y el desarrollo después del difícil periodo de la pandemia.

El gobierno también deberá encarar varios graves asuntos sociales como el cambio climático y la igualdad de género, para lo cual deberá instrumentar políticas firmes.

El PLA está comprometido a reducir a cero las emisiones netas hacia 2050, pero el primer paso será disminuirlas al 43 por ciento en 2030. Para ello será decisivo estimular el uso de coches eléctricos y desarrollar la energía renovable, amén de invertir 14 mil millones de dólares en la renovación y modernización del sistema eléctrico nacional.

En cuanto a la seguridad social, el PLA se comprometió a elevar el salario básico proporcionalmente a la tasa de inflación y destinar casi 700 millones de dólares para ayudar a los ciudadanos a acceder a los servicios de atención médica familiar, lo que disminuirá la presión financiera sobre los hogares.

Además, aumentará el presupuesto en educación y formación de habilidades, y desarrollará la infraestructura de transportes y telecomunicaciones.

Asimismo, se comprometió a seguir una política exterior más fuerte y profundizar las asociaciones en la región y en el mundo.

Después del acto de juramentación, Albanese realiza su primera visita a Tokio, la capital nipona, para participar en la cumbre de QUAD (Estados Unidos, Japón, India y Australia).

Las propuestas del PLA incluyen aumentar la ayuda externa a naciones insulares del Pacífico y Timor Leste en cuatro años. En cuanto al Sudeste Asiático, anunció una serie de iniciativas de cooperación como el envío de un enviado especial como embajador senior para trabajar con los miembros la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) para estrechar los lazos con la región, además de aumentar a 470 millones de AUD la ayuda al bloque.

Después de la Cumbre de QUAD, Albanese tiene previsto reunirse con líderes de los gobiernos estaduales australianos para consensuar estrategias. También planea encuentros con representantes de sindicatos, empleadores y organizaciones relacionadas en los próximos meses.

El líder del PLA aspira a trabajar de inmediato para centrarse en tareas como mejorar el acceso a la educación universitaria, desarrollar las infraestructuras, aumentar la producción e instrumentar iniciativas sobre energía limpia, con el fin de ayudar a Australia a superar las dificultades y materializar el objetivo de convertirse en una superpotencia en energía limpia.