Su creadora, Duong Thi Hanh, reveló que comenzó a elaborar Banh Cuon a los 14 años, pues por generaciones su familia ha estado dedicada a este oficio.
“Vi varias promociones de la fruta. Al principio solo quería probarla, pero la gente me sugirió hacer el Banh Cuon con su jugo. Entonces traté de elaborar un plato”, expresó.
Después de limpiar, la fruta se corta en trocitos y se pasa con agua por la batidora.
“Luego mezclo el licuado con harina de arroz el tiempo adecuado para lograr una combinación rosada”, explicó la cocinera.
“Debido al sabor diferente de cada fruta, fallé en los primeros platos, pero al final conseguí una buena receta. Lo importante es encontrar la fruta bien roja y dulce”, agregó.
Aunque el proceso no es tan complicado, el factor que hace delicioso al plato es un secreto.
La tortilla de harina, cocinada al vapor, delgada y suave, junto a la carne molida deliciosa y la salsa delicada.
El Banh Cuon de la señora Hanh parece más pequeño que el de otras cafeterías, suficiente para un bocado.
Además de carne molida, el rollito se elabora con huevo.
“El Banh Cuon tiene el olor fresco y el sabor dulce de la pitaya roja, aparte de mantener el sabor especial del plato tradicional. Especialmente, es mejor comerlo cuando está caliente”, añadió la cocinera.
“Tanto el tradicional como el nuevo, lo vendo al mismo precio. Un plato normal vale desde uno hasta dos dólares. El especial de cuatro dólares es para los fuertes”, comentó.
La cafetería Banh Cuon ba Hanh es pequeña, solo tiene capacidad para 15 o 20 personas, pero los comensales esperan su plato con paciencia.
“Hoy vine para probar el nuevo plato, del que oí hablar hace rato. Es más duro que el normal, pero considero su sabor diferente y muy bueno”, opinó un joven del distrito Hoan Kiem.
Especialmente, la cafetería posee una ‘colección’ de especias que incluye la pimienta de Binh Phuoc, el chile de Hue y la salsa de pescado de Phu Quoc, compartió la hija de la cocinera, Nguyen Thi Uyen.
“La cebolla roja frita, uno de los ingredientes principales del Banh Cuon, se corta a mano y se fríe con grasa de cerdo para lograr un mejor sabor”, explicó Thi Uyen mientras esperaba que la grasa se calentara.
“Esta cafetería se conoce a través de los sitios web de turismo. Es deliciosa y peculiar. Acabo de comer un plato de Banh Cuon hecha de pitaya roja y ahora pido otro normal. La gastronomía de Vietnam de verdad es el número uno entre la de los países que visité”, expresó David, un turista estadounidense.