Según las últimas estadísticas publicadas por las autoridades rusas, al menos 137 personas murieron y otras 182 resultaron heridas, muchas de ellas en condiciones graves, después de que atacantes armados irrumpieran en el centro comercial Crocus en Moscú y abrieran fuego.
Rusia celebró un día de luto nacional el 24 de marzo, con las banderas arriadas a media asta y las actividades de entretenimiento suspendidas.
Sólo el 23 de marzo, más de cuatro mil personas, incluidos vietnamitas, acudieron a Moscú a donar sangre para apoyar a las víctimas.
En una entrevista concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA), Minh Khoi expresó su convicción de que el Gobierno y el pueblo rusos seguirán unidos y pronto superarán esta terrible experiencia.
Después de enterarse del tiroteo mortal, la presidenta interina de Vietnam, Vo Thi Anh Xuan, envió el 23 de marzo un mensaje de condolencias al presidente ruso Vladimir Putin por la tragedia.
Por el mismo motivo, el primer ministro Pham Minh Chinh expresó condolencias a su homólogo ruso, Mikhail Mishustin, y el presidente de la Asamblea Nacional, Vuong Dinh Hue, extendió su pésame a los titulares del Consejo de la Federación, Valentina Matvienko, y de la Duma Estatal, Vyacheslav Volodin.
El mismo día, el canciller Bui Thanh Son trasmitió su pesar al ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov.
