Después de más de medio siglo de lucha contra el colonialismo español, en 1898 nació la República de Cuba como un país soberano en lo formal, pero subordinado a Estados Unidos (EE.UU.) en política y economía.
La Constitución de 1899 incluyó en un anexo la "responsabilidad" del gobierno estadounidense de garantizar la seguridad de Cuba, y el país se vio obligado a arrendar bases militares a EE.UU.
Durante la primera mitad del siglo XX, los obreros, campesinos, estudiantes e intelectuales cubanos lucharon contra el imperialismo estadounidense.
En 1925 se fundó el Partido Comunista de Cuba, con la misión de liderar la causa de la liberación, pero por razones objetivas y subjetivas el movimiento revolucionario cubano no alcanzó sus objetivos.
En 1953, el Partido Ortodoxo fue un cabal intérprete del pensamiento de José Martí y muchos de sus afiliados decidieron que la rebelión armada era la única forma de honrar al Héroe Nacional en el centenario de su nacimiento.
El 26 de julio de 1953, bajo el mando de Fidel Castro, un total de 160 revolucionarios asaltaron el Cuartel Moncada, la segunda mayor fortaleza militar de la isla, ubicado en la oriental ciudad de Santiago de Cuba.
Debido a factores aleatorios y técnicos, la acción fracasó y mucho de los jóvenes asaltantes murieron o fueron apresados y enjuiciados.
En el juicio que se le siguió, Fidel asumió su propia defensa y su alegato, históricamente conocido como “La historia me absolverá” es considerado la plataforma de la Revolución cubana. El documento identificó los objetivos del combate al imperialismo y a la dictadura de Fulgencio Batista, en pro de la independencia y la soberanía nacional, la democracia y la justicia social.
Fidel Castro fue condenado a 15 años de prisión, pero gracias a los reclamos del pueblo cubano, en mayo de 1955 él y sus compañeros fueron liberados. Después fundó el Movimiento 26 de julio, la fuerza de vanguardia que radicalizaría la revolución y la conduciría al triunfo.
Los jóvenes marcharon al exilio en México para prepararse a retomar la lucha. Regresaron a Cuba el 2 de diciembre de 1956 a bordo del yate Granma y se refugiaron en las montañas de la Sierra Maestra, donde libraron una esforzada guerra de guerrillas que fueron ampliando progresivamente con apoyo de otras fuerzas revolucionarias, como el Partido Socialista y la Federación de Estudiantes Universitarios.
Antes de cumplirse tres años del desembarco del Granma, el 1 de enero de 1959, el Ejército Rebelde, comandado por Fidel Castro, entró triunfante en La Habana, la capital. La instauración del Gobierno Revolucionario daba culminación a los combates por la liberación nacional y abría para el país una era de libertad e independencia, como preámbulo de la construcción del socialismo.
“La historia me absolverá” fue el documento programático que condujo a un proceso de profundas transformaciones económica y sociales. El antiguo Cuartel Moncada dejó de ser una fortaleza militar y fue convertido en Ciudad Escolar 26 de Julio.
La victoria simbólica del Moncada y la posterior victoria de la Revolución Cubana marcaron el despertar de Latinoamérica. Bajo el yugo del colonialismo y el neocolonialismo durante siglos de explotación y pobreza, los pueblos de la región despertaron, inspirados en el ejemplo de Cuba, se levantaron por alcanzar su segunda y definitiva independencia.
¡Han pasado 70 años desde los sucesos del Moncada, pero aquella victoria simbólica mantiene su significado y vitalidad!