El ministro subrayó que los consumidores son la fuerza pionera que “vota” por el comercio electrónico verde mediante sus decisiones de compra, mientras que las empresas desempeñan un papel clave en la innovación tecnológica y la transparencia informativa, y el Estado construye el marco legal que acompaña a toda la sociedad.
Cuando cada eslabón de este ecosistema avance hacia la “ecologización”, el comercio electrónico de Vietnam no solo mantendrá un crecimiento rápido, sino también sostenible, justo, transparente y respetuoso con el medio ambiente, en consonancia con el objetivo nacional de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050.
Según el Departamento de Comercio Electrónico y Economía Digital, entre 2021 y 2025 el sector crece en promedio 20 por ciento anual, alcanzó en 2024 un valor de 25 mil millones de dólares, equivalente al 9 por ciento de las ventas minoristas totales, y podría llegar a 100 mil millones en 2030, situando a Vietnam entre los mercados de mayor expansión mundial.
Sin embargo, el auge del comercio electrónico genera un problema creciente de residuos: en 2023 se consumieron 332 mil toneladas de envases, de las cuales 171 mil fueron de plástico, y sin soluciones adecuadas la cifra podría llegar a 800 mil toneladas anuales en 2030, de acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza en Vietnam (WWF Vietnam).
A ello se suma la huella de carbono del transporte, que según un informe de Google, Temasek y Bain & Company podría reducirse entre un 30 y 40 por ciento mediante la optimización de rutas y el uso de materiales reciclados, siempre que participen conjuntamente el Estado, las empresas y los consumidores.
Las encuestas reflejan esta demanda social: un 79 por ciento de los compradores en línea quiere que el Estado emita pronto regulaciones ambientales para el comercio electrónico; un 71 por ciento pide a las empresas opciones de embalaje sostenible, y un 61 por ciento considera esencial la comunicación y la educación ambiental.
A largo plazo, la educación ambiental de los consumidores y la formación de recursos humanos en comercio electrónico verde son prioridades, y según Nguyen Manh Hung, vicerrector de la Universidad de Transporte y Comunicaciones, ya se integran contenidos de economía circular y consumo sostenible en los programas de comercio electrónico y logística para preparar a los estudiantes como “ciudadanos verdes” del futuro.
Aunque las políticas y los esfuerzos empresariales son cruciales, el factor decisivo sigue siendo el consumidor, ya que cada pedido con menos embalaje y cada elección de opciones reciclables contribuye a reducir millones de toneladas de residuos plásticos.
De hecho, el comercio electrónico de Vietnam pasó de cuatro mil millones de dólares en 2015 a 31 mil millones en 2024 y se encamina a 100 mil millones en 2030, con el reto de que ese crecimiento vaya de la mano con la sostenibilidad y el objetivo de cero emisiones netas.