El funcionario reveló esa cifra en una conferencia de prensa realizada por el banco central para revisar el desempeño del sector bancario en los primeros seis meses de este año, y agregó que está en línea con la evolución más positiva de la economía.
Durante el tiempo pasado, las políticas crediticias y monetarias se fueron ajustando paulatinamente con la nueva normalidad, enfocándose en incrementar la inversión en diversos campos de la economía. Desde principios de este año, el BEV instruyó a las entidades relevantes concentrar el crédito en el negocio y la producción, así como controlar estrictamente este crédito para las áreas de riesgo potencial, indicó Minh Tu.
En el futuro cercano, el crecimiento crediticio positivo junto con el impacto del paquete de estímulo económico apoyará la recuperación nacional en esa rama, añadió.
A fines de abril, las instituciones de crédito ampliaron el plazo de pago y redujeron las tasas de interés para deudas por valor de más de 29,8 mil millones de dólares para 1,1 millones de clientes.
Los bancos también renunciaron a las tasas de interés para unos 490 mil clientes con préstamos pendientes combinados de más de 3,9 mil millones de dólares.
Es probable que Vietnam enfrente un riesgo de inflación en el futuro, y la situación monetaria y financiera global experimente muchas fluctuaciones que afectarán al país indochino, de acuerdo con la misma fuente.
Además, dijo que el BEV monitoreará la evolución del mercado en la nación y en el extranjero, así como la situación pandémica para administrar de manera sincronizada y flexible las políticas monetarias en función de controlar la inflación, estabilizar la macroeconomía y apoyar la recuperación económica.