Esta conmemoración no sólo rememora una etapa heroica de la historia nacional, sino que también expresa un sincero agradecimiento a los amigos internacionales que acompañaron a Vietnam en los años difíciles de la guerra.
La resistencia contra Estados Unidos del pueblo vietnamita fue una de las luchas por la independencia nacional que recibió más apoyo de los pueblos amantes de la paz en el mundo. Desde los países socialistas como la antigua Unión Soviética, China y Cuba, hasta los movimientos de liberación nacional en Asia, África y América Latina, así como las campañas pacifistas en los países occidentales, todos mostraron una solidaridad firme con la causa justa de Vietnam.
Antes y después del Acuerdo de París de 1973, Vietnam recibió asistencia material, técnica y de asesoría de los países hermanos. Frases emblemáticas como la del líder cubano Fidel Castro: “Por Vietnam, Cuba está dispuesta a dar hasta su propia sangre”, o el lema del pueblo indio: “Tu nombre es Vietnam, mi nombre es Vietnam, nuestro nombre es Vietnam” son reflejos claros del respaldo internacional hacia el país indochino.
![]() |
El primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y primer ministro del Gobierno Revolucionario, Fidel Castro, enarbola con orgullo la bandera tradicional de la Brigada Khe Sanh, del Ejército de Liberación de Tri Thien - Hue (Quang Tri, 15 de septiembre de 1973). Foto: VNA |
En numerosos países, se multiplicaron las campañas de solidaridad. En Suecia, Francia, Japón y Alemania, se organizaron campañas de recaudación de fondos y protestas masivas contra los bombardeos estadounidenses en Vietnam. En Nueva York, más de 18 mil personas marcharon contra la guerra. En Estocolmo, los jóvenes incluso fundaron una “zona liberada” simbólica en el centro de la ciudad. Estas expresiones de solidaridad se convirtieron en un fenómeno global.
En Estados Unidos, el movimiento contra la guerra alcanzó una escala sin precedentes, considerado por los medios como “una guerra dentro del propio Estados Unidos”. Surgió en universidades y se extendió a todos los sectores de la sociedad, incluyendo protestas multitudinarias y actos extremos como las autoinmolaciones de ciudadanos estadounidenses en señal de rechazo al conflicto bélico.
Además de los movimientos colectivos, también hubo historias personales profundamente emotivas, como la de la pareja japonesa Hikawa Hiroshi y Hikawa Naoko, miembros del Partido Comunista de Japón, quienes participaron activamente en las manifestaciones contra la guerra e hicieron de la causa por la paz en Vietnam una misión compartida de vida.
Cincuenta años después de la victoria histórica, Vietnam, de un país devastado por la guerra y aislado internacionalmente, se convirtió en una nación en desarrollo con ingresos cercanos al nivel medio alto.
El país se ha integrado ampliamente en la economía global, participa activamente en foros multilaterales y mantiene relaciones diplomáticas con 194 países miembros de las Naciones Unidas. En este 2025, también se conmemora el 30º aniversario del establecimiento de nexos diplomáticos entre Vietnam y Estados Unidos.
![]() |
Las casos azules desfilan frente a la tribuna. (Foto: VNA) |
El secretario general To Lam destacó que, como un pueblo que ha sufrido profundamente las consecuencias de la guerra, Vietnam valora la paz y desea cooperar con la comunidad internacional en la construcción de un futuro de armonía, prosperidad, unidad y desarrollo sostenible.
Asimismo, hizo un llamado a las generaciones actuales a actuar con responsabilidad para dejar a las futuras generaciones no solo un mundo mejor, sino también un legado de sabiduría y conciencia colectiva.
Vietnam reafirma su compromiso de continuar fortaleciendo las relaciones de amistad y cooperación internacional, bajo el principio de ser “un amigo, un socio confiable y un miembro activo y responsable de la comunidad internacional”.