Debido a sus emisiones de CO2 en el proceso de producción, la industria mundial de la moda es una de las causas del cambio climático, pero también se ve afectada por ese fenómeno.
Para ayudar a las empresas vietnamitas de textiles y prendas de vestir a reducir las emisiones mediante el uso eficiente de los recursos, la energía y la gestión de productos químicos, la Sociedad alemana para la Cooperación Internacional (GIZ) y la empresa francesa de Decathlon firmaron un memorando de entendimiento, en el cual se comprometieron a mejorar el desempeño ambiental de la cadena de suministro textil en Vietnam, según la Agencia de Noticias de este país.
En consecuencia, junto con el proyecto de biología (BEM), la organización GIZ cooperará con la empresa de Decathlon para realizar el programa de promoción del desarrollo sostenible en la industria textil en Asia (FABRIC), en aras de mejorar las capacidades de las empresas vietnamitas en la adaptación al cambio climático, el uso eficiente de la fuente hídrica, así como la gestión energética y química en las fábricas de la cadena de suministro.
En concreto, en el marco del proyecto FABRIC, se organizarán los cursos de formación y consultoría para proporcionar conocimientos básicos y especializados para las empresas de la industria de la moda sobre el cambio climático y las soluciones destinadas a reducir los gases de efecto invernadero.
Según Marc Beckman, director del proyecto FABRIC, la respuesta al cambio climático requiere la cooperación de las marcas internacionales para mejorar la capacidad de las fábricas en la cadena de suministro, y por eso, dicha cooperación es importante y urgente.
La empresa de Decathlon también proporcionará cursos de formación sobre el aumento del uso de la bioenergía y otras fuentes renovables para más de 100 fábricas de diversas marcas en el país indochino, reveló Beckman.
