Gran Victoria de la Primavera de 1975

Victoria de 30 de abril: Victoria de la cultura, las tradiciones y la historia de Vietnam

La Victoria del 30 de abril de 1975 es una victoria de la cultura, las tradiciones y la historia de Vietnam en sus milenarias luchas para defender la Patria, destacó el doctor Ruvislei González Saez, investigador principal del Centro de Estudios de Político Internacional de Cuba.
Ruvislei González Saez, investigador principal del Centro de Estudios de Político Internacional de Cuba. (Fotografía: VNA)
Ruvislei González Saez, investigador principal del Centro de Estudios de Político Internacional de Cuba. (Fotografía: VNA)

En una entrevista concedida a corresponsales de la Agencia Vietnamita de Noticias en La Habana con motivo del 50 aniversario de la reunificación de Vietnam (30 de abril de 1975), Ruvislei valoró que el triunfo hace 50 años marcó un capítulo glorioso en la historia de lucha por la construcción y la defensa de un Vietnam unificado y con ese acontecimiento se cumplió la misión de liberar totalmente el Sur y reunificar el país, para llevarlo a una nueva era, la de independencia y construcción nacional hacia el desarrollo y la prosperidad.

La victoria del 30 de abril de 1975 hizo posible también que el Vietnam de hoy sea pacífico, estable con grandes logros en desarrollo, que cuente con una de las economías más dinámicas del mundo y que haya cumplido con la mayoría de los objetivos de desarrollo del milenio, dijo.

De acuerdo con el investigador cubano, el programa de Renovación (Doi Moi), iniciado poco después, permitió que la realidad de una nación que quedó devastada por la guerra se transformara y que —según distintas agencias de la ONU— en la actualidad los índices de bienestar social vietnamitas superen a los de algunos países con igual o superior nivel de ingreso.

En estas cinco décadas, Vietnam ha logrado con éxito la renovación y ha alcanzado logros importantes y de significado histórico para convertirse en una nación con ingreso medio, un crecimiento económico promedio anual del siete por ciento y el ingreso per cápita supera los dos mil 200 dólares, admiró, y creó que los logros alcanzados en estos 50 años sientan las bases y premisas para que esta nación asiática continúe renovándose y progresando de modo más fuerte e integral en el futuro.

La victoria del 30 de abril dejó una gran lección sobre la promoción de la unidad nacional bajo la dirección ingeniosa y sabia del Partido Comunista con una línea política y militar independiente, autosuficiente, correcta y creativa, evaluó.

La victoria de la resistencia contra el imperialismo estadounidense por la independencia nacional fue fruto del sabio pensamiento y el arte militar vietnamita bajo el liderazgo acertado y creativo del Partido Comunista, expresó.

Agregó que el triunfo tuvo repercusión universal y dejó un profundo significado para la época, y que fue también una hazaña del heroísmo revolucionario, la dignidad y la inteligencia vietnamita en la era del gran líder Ho Chi Minh y del genio en estrategia militar del General Vo Nguyen Giap.

Ese acontecimiento marcó la historia del pueblo vietnamita, condujo al fortalecimiento de su unidad y, sobre todo, sentó las bases para el posterior desarrollo y la transformación acertada de la economía y la sociedad vietnamitas, a partir del afianzamiento de la independencia y la soberanía nacional, además de abrir el camino hacia la consagración del socialismo en el país, apuntó.

Según Ruvislei, en su ardua y célebre lucha de resistencia ante un país dividido en dos, el Partido Comunista de Vietnam, sabiamente guiado por Ho Chi Minh, concibió y siguió dos estrategias simultáneamente de revolución democrática popular en el Sur y la revolución socialista en el Norte, con el propósito de reivindicar la independencia y la reunificación nacional, para luego llevar al país a la época del socialismo próspero.

En ese contexto, el valioso apoyo material y espiritual de la comunidad internacional constituyó un factor clave que contribuyó también a la victoria sobre los invasores norteamericanos y su régimen títere instalado en Saigón, y de ahí, que la política exterior del Gobierno y el Partido vietnamitas promuevan la paz, la cooperación, el progreso y el respeto a las leyes internacionales, indicó.

Igualmente, según el erudito, ese histórico triunfo le da fuerza moral a las autoridades nacionales y provinciales para intensificar el combate contra la corrupción, el despilfarro y la degradación de la ideología política, la ética y el estilo de vida entre militantes y gobernantes en todos los niveles tan necesario para robustecer el programa de Renovación y el desarrollo nacional, al igual que fortalecer la unidad interna y derrotar complots de las fuerzas reaccionarias, fortaleciendo el liderazgo del Partido y el socialismo.

La victoria del 30 de abril fue un enorme impacto en la historia internacional ya que rompió totalmente el esquema geopolítico de Estados Unidos hacia el mundo, representó un gran estímulo para las fuerzas revolucionarias en la arena internacional y contribuyó a impulsar la lucha de la humanidad por la paz, la independencia nacional, la democracia y el progreso social, y a animar a los pueblos amantes de la paz en el proceso de la liberación del yugo del imperialismo, concluyó.

VNA