La alegría de un rescatador de tortugas
Al recibir la notificación sobre un rescate de tortuga en el mar de Cua Tung (Quang Tri), me puse a conducir 40 kilómetros para llegar a la escena del incidente. A pesar de su rostro bañado en sudor por el calor del mediodía, Tran Khuong Canh, trabajador de la Junta Directiva de la Reserva Marina de la isla de Con Co, se alegró de sobremanera de haber salvado una tortuga rara, que mientras estaba cazando medusas para alimentarse, quedó atrapada en la red de un pescador local.
Con el animal en sus brazos, Canh le comprobó el estado físico y encontró la placa de identificación VN(C)00182 etiquetado en su cuerpo. Resultó la misma tortuga que él y sus colegas habían rescatado hacía un mes a unos 30 kilómetros de la actual posición; pesaba 13,7 kilogramos frente al 12 kilogramos registrados en aquel momento. Se trata del primer quelonio salvado dos veces por el equipo de Tran Khuong Canh.
Según narró el funcionario, el recuerdo más interesante en esta ocupación fue el salvamento de una tortuga que pesaba 12 kilogramos en el distrito de Gio Linh. Nguyen Van Doan, el pescador local que la encontró atrapada en su red e informó a las autoridades competentes, pidió al equipo de rescate que dejara a su hijo ser parte de esta actividad como una lección sobre el respeto al medioambiente. El niño fue invitado a liberar el animal al mar, y con muchas ganas, mostró su deseo de proteger tortugas junto con los miembros del equipo.
Otra historia que impresionó a Tran Khuong Canh sucedió un día a finales de 2018, cuando los hermanos Nguyen Van Thoan y Nguyen Van Dai se dieron cuenta de dos tortugas atrapadas en su red de pesca, que pesaban nueve y diez kilogramos respectivamente. Después de avisarlo a la Reserva Marina de la isla de Con Co, dejaron su trabajo y regresaron enseguida a la tierra firme para entregarle los animales accidentados.
Fue la primera vez que la dicha organización salvó dos tortugas juntas, lo que contrasta con el hábito de buscar comida solo de esta especie. Acorde con los resultados de investigación de la UICN, por cada mil tortugas solo una puede sobrevivir hasta alcanzar la madurez debido a depredadores y otras amenazas en el medio natural. Por eso, el hecho de que dos tortugas fueron juntas a buscar comida muestra que Quang Tri les ofrece un entorno marino seguro e ideal para su crecimiento.
La Reserva Marina de la isla de Con Co fue establecida hace diez años con la misión de salvaguardar el hábitat marino, incluyendo proteger tortugas raras. El mar de Vietnam es hogar de cinco especies de ese reptil. Cuatro pertenecen a la familia Cheloniidae, que constan de golfina (Lepidochelys olivacea), tortuga carey (Eretmochelys imbricata), tortuga verde (Chelonia mydas) y caguama (Caretta caretta); la restante es tortuga laúd (Dermochelys coriacea), la única viva de la familia Dermochelyidae.
La tortuga laúd rescatada en el distrito de Hai Lang (Quang Tri)
Las más raras de dichas especies, carey y laúd, se encuentran principalmente en el mar de Quang Tri. La mencionada Reserva registró un laúd de 450 kilogramos que llegó a poner huevos en la playa del distrito de Trieu Phong de esa provincia, y fue la más pesada que ha inscrito hasta la fecha. Más recientemente, en 2014, los voluntarios en el distrito de Hai Lang descubrieron otro laúd, que pesaba 300 kilogramos y sus 132 huevos. De inmediato, la Junta Directiva de la Reserva asignó la guardia de ese nido durante más de dos meses y numerosos científicos extranjeros vinieron a la localidad vietnamita por motivos de investigación.
De acuerdo con Nguyen Van Hoa, director de la mencionada Reserva, la aparición constante de tortugas en las zonas marinas de Quang Tri se debe a los trabajos de divulgación por parte de su entidad para instar a los habitantes a proteger el animal y también el ambiente sano en la provincia.
Los científicos denominan a la tortuga marina el indicador del medioambiente, es decir, el entorno marino donde vive será limpio o poco contaminado, sin muchos impactos humanos. En este sentido, señaló el funcionario, desde principios de 2018 hasta la actualidad, un total de 26 tortugas se encontraron atrapadas en redes de pesca y fueron liberadas al mar.
Afirmó que el mar e islas de Con Co constituye un hábitat ideal para este reptil, especialmente zonas con arrecifes coralinos y plantas acuáticas, preferidas por las tortugas por una abundancia de comida.
El sueño de dedicar una playa a la reproducción de tortugas
La inspección y protección de playas donde las tortugas ponen huevos forma parte de la conservación de este animal. Gracias al respaldo de la UICN en Vietnam, la provincia central de Quang Tri ha logrado ciertos avances en esta materia.
Al respecto, Nguyen Van Hoa dio a conocer que en el pasado, la tortuga vivía en casi todas las zonas marinas a lo largo del país. Sin embargo, por varias razones actualmente se encuentra solo en algunas provincias costeras como Quang Ninh (norte) y Quang Tri (centro). Este animal juega un papel fundamental en mantener la estabilidad del ecosistema marino y también tiene un inmensurable valor en términos culturales, aseveró citando el ejemplo de la tortuga laúd en Quang Tri.
Los ejemplares de esa especie allí suelen pesar de 300 a 450 kilogramos y alimentarse de medusas. De esta manera, ayudan a controlar la cantidad de aguamalas en el mar y favorecer el desarrollo de huevos y crías de peces, su comida principal.
Los trabajos de la Reserva Marina de la isla de Con Co originalmente necesitaban hasta 18 empleados. Diez años tras su fundación, el número solo ha llegado a siete, por eso, cada persona tiene que trabajar dos veces más para cumplir todas las tareas. Cuando le pregunté cuál era su mayor sueño, Nguyen Van Hoa apuntó sin vacilación hacia las playas de los distritos de Vinh Linh y Gio Linh y me contestó: “Ojalá que las autoridades provinciales planifiquen pronto uno de esos dos sitios para dedicarlo a la reproducción de tortugas y así proteger la biodiversidad con mayor profesionalidad. En ese momento, será posible trasladar huevos de las reservas grandes a la localidad y guardarlos aquí hasta que salgan del cascarón. Y 30 años después, estas tortugas seguirán el hábito de su especie de volver al lugar de nacimiento para poner huevos”.