La UNOC 3 se llevará a cabo del 9 al 13 de junio en Niza, Francia, bajo el lema “Acelerar la acción y movilizar a todas las partes interesadas para conservar y utilizar sosteniblemente los océanos”.
Vietnam se incorporó a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como su miembro número 149 el 20 de septiembre de 1977 y, tras casi cinco décadas, se ha consolidado como un miembro activo y comprometido, especialmente en la promoción de los ODS.
El país ha demostrado su firme compromiso participando en foros globales sobre desarrollo sostenible, firmando varios acuerdos de libre comercio y obteniendo el apoyo de socios internacionales para avanzar en la implementación de los ODS.
Vietnam ha integrado la sostenibilidad de forma proactiva en sus compromisos multilaterales, mostrando constantemente que es un miembro confiable y constructivo en la comunidad internacional. También colabora con socios globales para enfrentar desafíos comunes como la seguridad marítima, el riesgo de desastres, el cambio climático, la seguridad alimentaria y la gestión de los recursos hídricos.
Actualmente, Vietnam está desarrollando una estrategia para un crecimiento económico marítimo sostenible basada en un desarrollo verde, la protección de la biodiversidad y la conservación de los ecosistemas. Busca equilibrar las prioridades económicas y ambientales, mientras aprovecha el potencial del océano como motor clave del crecimiento económico nacional. Asimismo, está intensificando sus esfuerzos para combatir el cambio climático y la elevación del nivel del mar, al tiempo que amplía la cooperación regional e internacional. Estas prioridades se alinean estrechamente con los objetivos de la UNOC 3.
Por invitación del secretario general de la ONU, António Guterres, y del presidente francés, Emmanuel Macron, el Primer Ministro Chinh participará en la conferencia como invitado especial.
Vietnam ya había participado en la ONUC 1 y ONUC 2, contribuyendo activamente en debates plenarios y temáticos.
En esta tercera edición, Pham Minh Chinh pronunciará el discurso inaugural en nombre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN), reafirmando el compromiso común de la región con el derecho internacional, incluida la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (UNCLOS), y con soluciones colectivas a los desafíos oceánicos.
También compartirá la experiencia de Vietnam en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con la conservación y el uso sostenible de los océanos, mares y recursos marinos.
Además, copresidirá una cumbre de alto nivel sobre las regiones del delta, junto con los presidentes de Colombia e Irak, donde se destacarán los impactos del cambio climático en estas áreas vulnerables y la disposición de Vietnam para aportar a soluciones globales.
El premier también participará en eventos económicos y marítimos en Mónaco, por invitación del Gobierno del Principado, junto con otros invitados especiales.
La viceministra de Relaciones Exteriores, Le Thi Thu Hang, subrayó que la presencia del Primer Ministro en la ONUC 3 refleja el papel de Vietnam como un socio internacional activo y responsable, comprometido con el multilateralismo, la ONU y el respeto al derecho internacional, en especial la UNCLOS, para abordar los retos oceánicos. Vietnam está dispuesto a fortalecer la cooperación global para lograr océanos azules, pacíficos, sostenibles y prósperos, en línea con los objetivos generales de la conferencia, significó la diplomática.
Los océanos son fundamentales para el desarrollo socioeconómico y la geopolítica mundial. Según la OCDE, se espera que la economía oceánica supere los 3 billones de dólares para 2030, convirtiéndose en la quinta economía más grande del mundo. Los océanos son esenciales para el comercio mundial, la seguridad alimentaria, las energías sostenibles y el transporte marítimo. Sin embargo, para lograr una economía oceánica inclusiva y sostenible se necesitará una inversión anual aproximada de 175 mil millones de dólares, junto con una cooperación estrecha entre gobiernos, organizaciones intergubernamentales, sector privado y sociedad civil.
Más allá de su valor económico, los océanos juegan un papel clave en la absorción del exceso de calor generado por la quema de combustibles fósiles. Por eso, protegerlos no solo significa preservar ecosistemas, sino también salvaguardar medios de vida, especialmente en países costeros, donde el mar es tanto una maravilla natural como una gran oportunidad económica.
La colaboración internacional es vital para evitar la sobreexplotación de los recursos marinos, combatir la acidificación, proteger ecosistemas, reducir la sobrepesca y frenar la contaminación. En los últimos años, la conservación marina ha ganado mayor atención a nivel mundial.

Entre los avances importantes está el Marco Mundial para la Diversidad Biológica (MBB) de Kunming-Montreal, adoptado en 2022, que busca conservar y restaurar al menos el 30 % de las áreas terrestres y marinas para 2030. La adopción en 2023 del Tratado de Alta Mar supuso otro gran paso, permitiendo establecer áreas marinas protegidas donde se puedan limitar actividades como la pesca o la minería. Sin embargo, solo 28 países han ratificado el tratado hasta ahora, y faltan todavía 60 ratificaciones para que entre en vigor.
Aunque hay progresos, pasar del compromiso a la acción concreta sigue siendo un gran desafío. Estudios recientes advierten que la meta de proteger el 30 % de los océanos para 2030 está en riesgo debido al cambio climático, la acidificación, la contaminación plástica y la sobrepesca. Además, problemas como desastres naturales, pandemias e inseguridad alimentaria continúan amenazando el desarrollo sostenible global.
Al mismo tiempo, la falta de financiamiento limita el avance hacia los ODS para 2030. La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 sigue siendo el marco legal principal para las actividades marítimas, aunque enfrenta crecientes desafíos.
Por eso, los logros actuales no son suficientes para garantizar la salud de los océanos. Si los compromisos no se cumplen con urgencia, las áreas marinas protegidas podrían quedar solo en el papel. Los expertos coinciden en que proteger los océanos no es un reto que pueda asumir una sola nación, sino que requiere una acción global coordinada.
En este contexto, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (ONUC), que se realiza cada tres años, funciona como una plataforma global para impulsar la acción hacia el ODS 14. Coorganizada por un país desarrollado y otro en desarrollo, reúne a líderes mundiales, expertos y actores clave para crear soluciones y alianzas.
La primera edición (ONUC 1) tuvo lugar en Nueva York en 2017, organizada por Suecia y Fiyi. La segunda (ONUC 2) se celebró en Lisboa en 2022, copresidida por Portugal y Kenia, y se centró en enfoques innovadores y científicos.
La UNOC 3 de este año, copatrocinada por Francia y Costa Rica, buscará generar consenso global y asegurar fondos para la conservación oceánica, en un momento en que persisten divisiones internacionales sobre temas como la minería en aguas profundas, los residuos plásticos y la sobrepesca.
La conferencia contará con 10 sesiones plenarias y 10 diálogos temáticos que se desarrollarán en paralelo, con la participación de jefes de Estado y de Gobierno de numerosos países. Se considera un paso clave para avanzar hacia los ODS en 2030, orientando políticas marinas para la gobernanza global, regional y nacional, así como programas liderados por organismos internacionales y regionales. Se espera que los debates definan estrategias a largo plazo para inversión financiera, investigación científica y gestión marina, con impactos de gran alcance.