Según Nguyen Van Dinh, vicepresidente de la Asociación Nacional de Bienes Raíces de Vietnam (VNREA), racionalizar el aparato estatal ayudará a facilitar los procedimientos administrativos, reduciendo así el tiempo y los costos para las empresas.
La eliminación de las barreras legales promoverá el desarrollo del mercado inmobiliario, allanando el camino para un nuevo ciclo de crecimiento más próspero, dijo, y consideró que el mercado inmobiliario debería experimentar una recuperación más marcada en 2025 que el año pasado.
Desde el punto de vista de la autoridad gubernamental, Vuong Duy Dung, subdirector del Departamento de Gestión de Vivienda y Mercado Inmobiliario del Ministerio de Construcción, ve esta racionalización como una oportunidad no sólo para las empresas y el mercado inmobiliario, sino también para todo el sector de la construcción.
Según él, con la reorganización se simplificarán los trámites para la inversión en proyectos inmobiliarios. Además, una descentralización más clara permitirá una implementación más rápida de los proyectos, enfatizó.
Además de racionalizar el aparato del sistema político, las tensiones comerciales globales tendrán impactos en la economía nacional en general y en el mercado inmobiliario en particular, recalcó.
Si Vietnam puede evitar los aranceles estadounidenses, se convertirá en un destino atractivo para los principales inversores internacionales, aseveró.
Como resultado, el sector inmobiliario industrial experimentará un fuerte crecimiento, lo que conducirá al desarrollo de otros segmentos relacionados, como la vivienda para trabajadores y la vivienda social, indicó Le Van Binh, subdirector del Departamento de Asuntos Territoriales del Ministerio de Recursos Naturales y Medio Ambiente.
El segmento de vivienda social, por otra parte, no se verá afectado directamente por las tensiones comerciales globales y se beneficiará de diversos mecanismos preferenciales, atrayendo así a muchos inversores en los próximos años.
Una vez completado el proyecto de construcción de un millón de viviendas sociales, otros segmentos del mercado inmobiliario se verán afectados. En particular, se espera que el segmento de vivienda de alta gama experimente una desaceleración debido a una demanda más débil, evaluó el especialista.