El establecimiento de Thanh Nien respondió a la necesidad urgente de un medio organizado y con rigor ideológico para la transmisión de ideas revolucionarias, avivando el espíritu patriótico del pueblo. A partir de ahí, surgieron publicaciones como Tap chi Do (Revista Roja), Dan chung (Población), Viet Nam doc lap (Vietnam independiente), Co giai phong (Bandera de liberación), entre otras, operando en condiciones clandestinas, pero con gran impacto popular.

La prensa revolucionaria cumplió un rol crucial: conciencia política, movilización y contribución decisiva a la Revolución de Agosto y al nacimiento de la República Democrática de Vietnam, el primer Estado democrático y popular del sudeste asiático.
Durante las guerras contra Francia y Estados Unidos, la prensa revolucionaria se convirtió en un frente vital. Bajo el fuego enemigo, decenas de periodistas arriesgaron sus vidas para motivar al pueblo, contrarrestar la propaganda enemiga y defender la verdad. Más de 500 periodistas y reporteros cayeron en acción, incluyendo más de 260 de la Agencia Vietnamita de Noticias (VNA).
“Cientos de reporteros estuvieron presentes en los campos de batalla a lo largo de las distintas épocas, sin temer las dificultades ni los sacrificios, entregándolo todo para cumplir con su misión. Se puede decir que, durante la resistencia, no hubo frente de combate, gran campaña, ni zona estratégica donde no estuvieran presentes los profesionales de la prensa. Hemos tenido más de 500 periodistas caídos en combate. Esto refleja la brutalidad de la guerra, y al mismo tiempo, el espíritu de sacrificio de quienes ejercen el periodismo. He llamado a mis colegas ‘los que escriben la historia con sangre entre el fuego cruzado’”, compartió el periodista Tran Mai Huong, exdirector general de la VNA.
Tras la reunificación en 1975 y, particularmente desde el VI Congreso Nacional del Partido Comunista (PCV) en 1986, la prensa asumió nuevas funciones: más allá de transmitir la política de reforma del Partido, actuó como voz vigilante y promotora del progreso social. Entrado el siglo XXI, con la globalización y la explosión informativa, los medios se afianzaron como “bastión ideológico” para contrarrestar perspectivas erróneas y afirmar la verdad y valores sociales.
Durante la pandemia del Covid-19, la prensa fue la “primera línea de información”, informando con precisión sobre la evolución del virus, divulgando recomendaciones gubernamentales y salud pública, y generando unidad y esperanza en la sociedad.
Además, los medios estatales jugaron un rol clave en la diplomacia mediática, promoviendo la imagen de Vietnam globalmente a través de contenidos multilingües como VietnamPlus, VTV4, VOV Mundo, etcétera.
Frente a exigencias renovadas, medios como Tuoi Tre (Juventud), VietnamPlus y VTV Digital lideran la transición al contenido multiplataforma: videos cortos, noticias en varios idiomas, presencia en redes sociales y plataformas OTT. En particular, VietnamPlus, periódico electrónico de la VNA, ha implementado un sistema CMS que permite producir contenidos en varios idiomas y difundirlos en webs, aplicaciones y redes.
Do Thi Ngoc Ha, directora de la Oficina del periódico Tuoi Tre en Hanoi, dijo: “Mejorar la capacidad tecnológica no solo implica invertir en equipamiento, sino transformar la mentalidad del equipo periodístico y el funcionamiento de la redacción”.

La Resolución 18-NQ/TW del Comité Central del PCV del XII mandato y la revisión de la Ley de Prensa han aportado un marco jurídico esencial para reorganizar los medios hacia estructuras más profesionales, eficientes y adaptadas a la era digital.
En la Exposición Nacional de Medios Digitales 2025, celebrada en Hanoi con motivo del centenario, Nguyen Trong Nghia, jefe de la Comisión de Propagada, Educción y Movilización de Masas del Partido, afirmó que la prensa revolucionaria ha recorrido un siglo glorioso, pero esa gloria solo cobra sentido si continúa con la aspiración de ir más allá.
Llamó a los medios y periodistas a renovar la mentalidad, profundizar en su rol social y elevar la calidad del contenido.
El secretario general del PCV, To Lam también subrayó: “La nueva era impone exigencias y misiones nuevas, más elevadas para la prensa revolucionaria; exige que este se desarrolle de manera correspondiente, se alce junto a la nación y esté a la altura de un periodismo profesional, humanista y moderno”.