En 2020, Tailandia exportó frutas y verduras frescas y procesadas por valor de más de cuatro mil 200 millones de dólares. Con condiciones climáticas y geográficas relativamente semejantes, los productos agrícolas tailandeses y vietnamitas cuentan con muchas similitudes. Sin embargo, para los productos del mismo tipo, los de Tailandia tienen una mayor ventaja competitiva.
Según la consejera comercial de la Embajada vietnamita en Bangkok, Tran Thi Thanh My, Tailandia es un mercado de exportación potencial para las empresas vietnamitas. Aunque vende muchos productos agrícolas, ese país debe importar un gran volumen de hortalizas, tubérculos y frutas. En 2020, las importaciones tailandesas de hortalizas frescas y procesadas totalizaron más de dos mil 600 millones de dólares.
Por su parte, Vietnam tiene muchos productos fuertes en comparación con Tailandia, como el lichi y la pitaya. Muchas empresas tailandesas importaron estas frutas vietnamitas para venderlas en grandes sistemas de supermercados, mientras otras compraron materias primas agrícolas de Vietnam para el procesamiento en su país.
La quinta Semana de Productos vietnamitas en Tailandia, organizada bajo el auspicio de la Oficina de Comercio del Ministerio de Industria y Comercio de Vietnam en ese país, en colaboración con el Grupo Central en la provincia de Udon Thani, fue una oportunidad para presenciar la preferencia de los consumidores tailandeses por los productos agrícolas vietnamitas.
Según la funcionaria, en ese evento, los puestos que vendieron lichi, pitaya y café de Vietnam siempre atrajeron a un gran número de clientes. El lichi cosechado en la norteña provincia vietnamita de Bac Giang, aunque es dos o tres veces más caro que el lichi tailandés, sigue siendo muy popular entre los consumidores tailandeses.
Wanchai, un cliente tailandés, compartió que el lichi vietnamita, aunque es un poco caro, es muy delicioso y se ha convertido en una especialidad en su país.
Este evento forma parte de una serie de actividades destinadas a fomentar la exportación de productos agrícolas vietnamitas a Tailandia.
A pesar de estar ausentes por las dificultades causadas por la pandemia del Covid-19, las empresas vietnamitas enviaron sus productos para presentarlos en ese evento. La participación de Vietnam en esa cita obtuvo unos resultados iniciales muy positivos, recalcó.
En una entrevista concedida al periódico Nhan Dan (Pueblo), Emmanuel Couronne, director de mercadería de la corporación Central Food Retail, dio a conocer que su empresa importa productos agrícolas vietnamitas a Tailandia desde 2006, principalmente fruta del dragón y batata. En 2017, la entidad introdujo el lichi en el mercado tailandés y está negociando con los socios vietnamitas para importar otros renglones agrícolas del país indochino.
Según Tran Thanh My, además de los clientes locales, los artículos vietnamitas son consumidos por la comunidad de tailandeses de origen vietnamita. Este es un grupo de clientes potencial porque tiene una gran demanda de productos de la nación indochina, además de ser propietarios de muchas tiendas pequeñas y supermercados para la distribución de las mercancías vietnamitas, señaló.
Explicó que aunque los productos agrícolas vietnamitas tienen buena calidad y precios competitivos, todavía no poseen una gran ventaja sobre sus rivales tailandeses. Las empresas vietnamitas deben indagar más sobre las necesidades de los consumidores tailandeses y cumplir con los estándares establecidos por ese mercado. “Eso significa que tenemos que vender lo que necesita el mercado, no lo que tenemos”, dijo.
A su vez, Emmanuel Couronne agregó: “Para los productos agrícolas vietnamitas, elegimos los que tienen fortalezas y no enfrentan mucha competencia de los artículos tailandeses. Al mismo tiempo, debemos importar mercancías de valor agregado como productos agrícolas con indicación geográfica, o con ventajas como sabores exquisitos o frutas fuera de temporada”.
Indicó que, para expandir su presencia en el mercado tailandés, las empresas vietnamitas deben mejorar los estándares de higiene e inocuidad de alimentos, cumplir con los estándares locales y garantizar un suministro continuo.
Tran Thanh My evaluó que, al exportar productos a Tailandia, las compañías vietnamitas necesitan encontrar socios y agencias confiables que las apoyen, porque precisan colaborar con un socio tailandés con el objetivo de registrar y conseguir la licencia para importar y distribuir productos agrícolas en ese mercado. El proceso de importación incluye muchas otras regulaciones y para las compañías interesadas, la Oficina de Comercio de la Embajada de Vietnam en Tailandia siempre está a su disposición.