El dinamismo de las empresas vietnamitas se refleja en los datos de comercio exterior. El sector de computadoras y productos electrónicos, con unos ingresos de 86 mil millones de dólares estimados para octubre, se erige como el motor del crecimiento. Este desempeño ha sido crucial para que el total de las exportaciones nacionales en los primeros diez meses del año alcance los 390 mil millones de dólares.
Junto a la electrónica, otros sectores industriales como maquinaria, equipos y repuestos también registran un avance significativo, con un crecimiento del 13,5 por ciento interanual y una previsión de cerrar el año con 55 mil millones de dólares en ingresos.
El sector agroalimentario vive su propia revolución, liderado por el café. Vietnam ha exportado 1,27 millones de toneladas de este grano, generando 7,2 mil millones de dólares, con un precio promedio un 45 por ciento superior al del año pasado. Según el presidente de la Asociación de Café y Cacao de Vietnam (Vicofa), Nguyen Nam Hai, la cosecha 2024-2025 ha registrado los precios más altos de la historia.
Este éxito no se basa únicamente en la exportación de materias primas. Cada vez más empresas invierten en procesamiento para exportar café tostado, soluble y productos de marca vietnamita, una estrategia que busca posicionar al país en segmentos de mercado más elevados.
Los tratados de libre comercio (TLC) han sido un catalizador fundamental. El acuerdo con la Unión Europea (EVFTA), por ejemplo, ha eliminado los aranceles para el café, multiplicando por cinco el valor de las exportaciones a este mercado. Otros productos como el arroz, los anacardos y las frutas y hortalizas también se han beneficiado, lo que permite a las empresas vietnamitas acceder a mercados más exigentes.
Este panorama refleja una transición estratégica: Vietnam ya no se limita a vender un mayor volumen, sino que avanza decididamente hacia la exportación de productos de mayor valor.
Paralelamente, el país consolida su papel en la cadena de valor global. Según el Banco Mundial, las exportaciones de electrónica, computadoras y teléfonos representan más de un tercio del total. La presencia de gigantes como Samsung, LG y Foxconn, junto a una red en expansión de proveedores locales, ha convertido a Vietnam en un centro de ensamblaje clave en el Sudeste Asiático.
Un informe de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) confirma dicho avance y clasifica a Vietnam como líder mundial en la proporción de exportaciones de alta tecnología, que alcanza el 36,1 por ciento de su comercio total.
Expertos subrayan que este es el momento para que Vietnam dé el salto de ser un "centro de ensamblaje" a convertirse en un "centro de innovación y tecnología", incremente las inversiones en investigación y desarrollo e integre aún más a las empresas locales en las cadenas de valor globales. El objetivo a medio plazo es que las exportaciones de alta tecnología superen el 45 por ciento del total.
Aunque se observa una leve desaceleración en algunos pedidos de electrónica, el optimismo persiste. Se prevé que en los dos últimos meses del año se conseguirán miles de millones de dólares adicionales, para acercar el total de exportaciones anuales a la simbólica cifra de los 100 mil millones de dólares en los sectores clave, y confirmar el vigoroso impulso de la economía vietnamita.