Para 2023, las exportaciones de textiles y prendas de vestir pueden llegar a 47 - 48 mil millones de dólares en el escenario positivo y a 45 - 46 mil millones de dólares en el escenario inferior, señaló la Asociación Nacional de ese rubro (VITAS) y agregó que la forma en que las empresas se adapten a los cambios en los mercados afectará su crecimiento en cualquier circunstancia.
En el escenario positivo: las inestabilidades en el mercado global estarán bajo control, todas las actividades del sector pueden haberse recuperado para fines del primer trimestre del próximo año. En tal caso, se pueden lograr 48 mil millones de dólares en ingresos.
Según el presidente de VITAS, Vu Duc Giang, en el segundo escenario bajo el cual el mercado global se recuperará en la segunda mitad de 2023, el valor de las exportaciones puede alcanzar los 45 mil millones de dólares.
En el contexto actual, cuando los mercados internacionales no realizan pedidos de textiles y prendas de vestir a largo plazo, las empresas pueden pasar a producir artículos de menor valor. En 2022, dado que las empresas comenzaron a diversificar mercados y productos, se constató un crecimiento sostenido.
Mientras tanto, VITAS prevé que sus ingresos por exportaciones este año probablemente alcancen los 44 mil 500 millones de dólares, un 10 por ciento más que en 2021.
El Grupo de Textiles y Confecciones de Vietnam (Vinatex) dijo que aunque se habían hecho pronósticos tempranos, sus miembros todavía estaban sorprendidos por los cambios impredecibles en 2022, como el conflicto Rusia-Ucrania y los aumentos en los precios del petróleo, la inflación y las tasas de interés, que han causado una caída de la demanda en los mercados importadores.
Sin embargo, Vinatex estimó sus ingresos consolidados para 2022 en unos 827 millones de dólares, un 15 por ciento más que el año pasado y un ocho por ciento más que el objetivo establecido, con una ganancia de más 42,3 millones de dólares, un 14,6 por ciento superior a la meta trazada. Estas cifras se evalúan como alentadoras en medio de numerosas dificultades del mercado.
Al señalar tres escenarios, el presidente de Vinatex, Le Tien Truong, comentó que en el mejor de los casos: la economía mundial se habrá estabilizado y los conflictos geopolíticos habrán terminado para fines del segundo trimestre; las exportaciones el próximo año pueden aumentar entre cuatro y cinco por ciento con respecto a 2022.
En el escenario intermedio (las inestabilidades persistirán, la inflación se mantendrá y las tasas de interés seguirán aumentando hasta el tercer trimestre), las exportaciones pueden permanecer sin cambios en comparación con este año.
Y en el peor de los casos, donde la economía mundial entrará en recesión, los ingresos de 2023 pueden ser un cinco por ciento menos que los de este año.
Sin embargo, los expertos indicaron que todavía hay ciertas señales positivas para el próximo año como el control de la pandemia del Covid-19, el acostumbramiento del mundo a una nueva normalidad, la relajación de la política de cero Covid de China, y signos de disminución de costos de logística, entre otros.