La estrategia establece el objetivo de mejorar gradualmente la calidad del desarrollo urbano en términos de economía, sociedad, infraestructura, arquitectura, vivienda y calidad de vida de las personas.
Al mismo tiempo, se aumentará la calidad de la planificación de la construcción y desarrollo urbano, se formará una serie de cadenas urbanas inteligentes en regiones económicas claves de las zonas Norte, Sur y Central.
Se conectará gradualmente a redes urbanas inteligentes de la región y del mundo y se construirán ciudades bajas en carbono para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Hacia 2045, la industria de la construcción será capaz de diseñar y construir proyectos de construcción modernos y complejos y podrá expandir sus mercados operativos en el extranjero. Mientras, la tasa de urbanización se encontrará en el grupo promedio alto de las regiones de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) y Asia.
Específicamente, en el campo del desarrollo urbano, resulta necesario implementar sincrónicamente políticas para descomprimir y reducir la carga en las grandes áreas urbanas, llevando personas a áreas urbanas circundantes que cuentan con instituciones culturales completamente formadas, infraestructuras técnicas y sociales. También, la industria se centrará en la promoción de sistemas de infraestructuras y servicios en ciudades satélites y modelos de “ciudad dentro de la ciudad”.
En cuanto al sector de viviendas, se debe implementar la Estrategia Nacional de Desarrollo de Vivienda para 2030, con visión a 2045. Se renovarán métodos y modelos de gestión y desarrollo de las viviendas sociales, especialmente para trabajadores en zonas industriales. Además, se gestionará y monitoreará de cerca el desarrollo de edificios de apartamentos en el centro de las grandes áreas urbanas.
Con respecto a la gestión del mercado inmobiliario, se necesita explotar y utilizar eficazmente los bienes inmuebles, especialmente los terrenos. Se desarrollará una variedad de tipologías inmobiliarias para satisfacer las necesidades del desarrollo socioeconómico, asegurando el equilibrio de la oferta y la demanda de cada segmento y localidad, en cada época.