El año pasado, el sector de inversión extranjera continuó resaltando en el panorama económico de Vietnam, con un capital total de 38 mil millones de dólares y un desembolso de 20 mil 400 millones de dólares. Japón ocupó el segundo lugar en la lista de inversión extranjera directa en el país sudesteasiático, con cuatro mil 385 proyectos con un capital registrado de más de 59 mil 300 millones de dólares.
Aparte de la industria, los inversores nipones muestran también más atención a los ámbitos como comercio minorista, finanza, banca y alimentación, con la incursión de grandes compañías como AEON y Uniqlo o la compra de acciones de los bancos vietnamitas Vietcombank y Eximbank por parte de Mizuho y Sumitomo Mitsui Banking, respectivamente. De esta forma, el capital de inversión japonesa se está expandiendo gradualmente, ejerciendo una presencia más profunda y amplia en la economía vietnamita.
Según una encuesta realizada por la firma nipona NNA, las empresas del país del sol naciente eligieron a Vietnam como el destino de inversión más prometedor de Asia en 2020, superando tanto a la India como a otros países el Sudeste Asiático.
En el reciente Foro económico, turístico y laboral Japón-Vietnam, el viceprimer ministro vietnamita Vuong Dinh Hue reiteró que el país indochino siempre crea las mejores condiciones para los inversores, entre ellos los japoneses. Especialmente, desea que Japón sea el mayor inversor de Vietnam, recalcó.
Informó que Hanói, como país de la región del Mekong, acordó con Tokio priorizar tres ejes de interconexión, entre ellos el enlazamiento de transporte y energía, la mejora de las conexiones de la infraestructura blanda para promover el comercio y la inversión, además de impulsar la conectividad humana y digital.