Según informes locales, la zona residencial tiene 17 viviendas, de las cuales cinco fueron arrasadas. Antes de que se produjera el deslizamiento de tierra, el jefe de la aldea, Vang Seo Chu, de 33 años, evacuó proactivamente a 115 residentes, todos ellos de la etnia Mong, a una zona segura.
En la actualidad, las autoridades locales han llevado a 115 residentes a un refugio seguro, mientras se realizan esfuerzos para restaurar la aldea después de la tormenta. Cabe destacar que 23 niños de las familias afectadas han vuelto a la escuela desde el 15 de septiembre, lo que garantiza que su educación pueda continuar con normalidad.
Después de tres días de discusiones, Petrovietnam y las autoridades locales acordaron como lugar para la reconstrucción de la aldea una zona que no está demasiado lejos del antiguo emplazamiento.
Este fin de semana, representantes del Grupo viajarán a Lao Cai para inspeccionar el área y discutir planes específicos con las autoridades locales para acelerar la construcción de la nueva zona residencial para que la comunidad estabilice su vida.
El área de reasentamiento cubrirá aproximadamente 2,5 hectáreas y albergará a unas 40 familias. Se construirá en una zona de colinas de canela, a aproximadamente un kilómetro de la antigua ubicación, en la comuna de Coc Lau, distrito de Bac Ha.
Hasta el 18 de septiembre, Petrovietnam, sus afiliados, organizaciones y empleados donaron un total de 1,8 millones de dólares. La empresa planea brindar apoyo a 21 provincias y ciudades.
