Son innegables dichos frutos, que sirven como prueba vívida contra todos los argumentos tergiversadores y calumnias en torno al asunto de derechos humanos en Vietnam.
(Primera parte)
En el 32o período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (UNHRC, por sus siglas en inglés), celebrado del 21 de enero al primero de febrero de 2019, el grupo de trabajo del Examen Periódico Universal (EPU) examinó la situación de derechos humanos en 14 estados, incluido Vietnam. En el segundo día de trabajo, la delegación vietnamita, encabezada por el viceministro de Relaciones Exteriores, Le Hoai Trung, presentó el Informe nacional sobre la salvaguardia y promoción de derechos humanos en cumplimiento del mecanismo del EPU. Más tarde, en la 125a reunión de las Naciones Unidas acerca del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (ICCPR, por sus siglas en inglés) realizada los días 11 al 12 de marzo del mismo año, la delegación del país indochino, a cargo del viceministro de Justicia, Nguyen Khanh Ngoc, presentó el tercer Informe nacional sobre el tema.
Dichos documentos resaltaron logros que ha cosechado Vietnam en materia de derechos humanos en los últimos años, apuntaron algunas limitaciones todavía existentes y manifestaron la convicción por parte de su Estado de solventarlas con prontitud y continuar los esfuerzos de proteger y desarrollar los derechos humanos. En ambas ocasiones, los participantes valoraron altamente la ponencia de la delegación vietnamita y le auguraron a la nación indochina a tener más éxitos en esta labor en el futuro.
Sin embargo, antes, durante y después de esas sesiones, las fuerzas hostiles y algunas organizaciones y personas que carecen de buena voluntad incitaron campañas de calumnia, falsedad y tergiversación sobre derechos humanos en Vietnam para difamar al país ante el público internacional y a la vez proteger a algunos individuos que les han etiquetado de “defensor de derechos humanos, prisionero de conciencia, periodista de libertad”.
Figuran entre ellas Observatorio de Derechos Humanos (HRW, por sus siglas en inglés), Reporteros Sin Fronteras (RSF, por sus siglas en francés), Freedom House (FH), Amnistía Internacional (AI, por sus siglas en inglés), la organización terrorista “Viet tan” (reforma de Vietnam) y algunas estrambóticas como “Comité de Vietnam sobre derechos humanos”, “Comunidad de comunistas vietnamitas refugiados en los Países Bajos”, “Federación de vietnamitas refugiados en Alemania”, con el respaldo de los medios como BBC, VOA, RFA, RFI, entre otros.
Todas esas organizaciones y agencias de comunicación tienen en común la táctica de no apoyarse en la realidad de derechos humanos en Vietnam, tergiversar la verdad y utilizar noticias fabricadas y propagadas en internet por las fuerzas hostiles al país. Encima, ignoran los logros de Vietnam en esta materia, emplean falsas analogías para proteger a algunas personas delincuentes ya condenadas por la justicia nacional, y más.
A pesar de tales acciones de sabotaje, es innegable la verdad de lo que está ocurriendo en Vietnam. En los últimos años, la nación indochina no cesa de crecer y elevar su prestigio en la palestra internacional; como resultado, han cambiado obviamente la calidad de vida y el ingreso de los pobladores. Toda la gente vietnamita tiene acceso a sus derechos legítimos y oportunidades de desarrollo personal, así como goza de una vida material y espiritual cada vez mejor.
En aras de cumplir los objetivos de desarrollo sostenible y la garantía del derecho humano al desarrollo, de los derechos de los grupos vulnerables y de los trabajadores, el Estado vietnamita ha promulgado y ha implementado con enorme esfuerzo varios programas nacionales claves destinados a una reducción sostenible de la pobreza, la seguridad alimentaria, la mejora de la nutrición, el impulso de una agricultura sustentable, la atención de la salud humana y la construcción de nueva ruralidad, dando como fruto efectos sociales positivos.
A finales de 2018, la tasa promedio nacional de hogares pobres se situó en un 5,35 por ciento (1,35 por ciento inferior a la del mismo lapso de 2017), lo que contribuyó a aumentar el ingreso de este grupo de un 15 por ciento a un 20 por ciento. La renta per cápita del pueblo rural también se vio mejorada, de 18 millones 600 mil dongs vietnamitas (796 dólares) en 2012 a 32 millones de dongs vietnamitas (mil 369 dólares) en 2017.
En marzo de 2018, más de 570 mil hogares pobres en el campo recibieron financiamiento para reparar su casa; se proporcionó vivienda digna a más de 14 mil hogares en la región central del país, donde suelen producirse tormentas e inundaciones; se cumplieron 982 proyectos, que incluyen más de 190 hogares en el programa de planificación de asentamientos en terrenos expuestos a inundaciones del Delta del Río Mekong.
Cabe notar que, cada año el gobierno vietnamita dedica decenas de miles de dongs vietnamitas del presupuesto estatal a comprar seguro de salud para los pobres y ayudar a los habitantes que se encuentran cerca del umbral de la pobreza a obtener el suyo. Hasta 2017, se registraron en toda la nación más de 34 millones 200 mil pobres, étnicos y niños menores de seis años de edad afiliados a esa cobertura médica. Solo en ese año más de 66 millones de pobres y 15 millones de personas encontradas cerca del umbral de la pobreza tuvieron exámenes de salud con un total de 45 billones de dongs vietnamitas (más de mil 900 millones de dólares) cubiertos por los fondos del seguro médico.
Se debe mencionar, además, otros logros en áreas rurales. Por ejemplo, hasta el 31 de diciembre de 2017 un 99,4 por ciento de las comunas en todo el país contaban con rutas automovilísticas hacia su zona céntrica, un cien por cien de las comunas y 97,8 por ciento de los pueblos se conectan a la red eléctrica nacional, un 99,7 por ciento de las comunas disponían de jardines de infancia y escuelas primarias, entre otras cifras.
En una mayor escala, Vietnam también asegura, apoya y crea condiciones favorables para el desarrollo de otros derechos humanos. Los siguientes ejemplos se sacan de los mismos aspectos que las fuerzas hostiles tienden a tergivesar y calumniar.
En cuanto a la libertad de creencia y religión, la Ley de Creencia y Religión 2016 y dos Decretos guiando su implementación sirven como marco legal para asegurar la libertad del pueblo en esta materia. Actualmente, se encuentran en Vietnam 42 organizaciones de 15 religiones con personalidad jurídica, 60 establecimientos de educación religiosa del budismo, catolicismo, protestanismo y hoa hao, una secta budista de Vietnam.
Hasta 2017, el área de terreno que usaban siete mil 102 organizaciones y establecimientos de culto en la nación indochina alcanzó una suma de 14 mil 850 hectáreas. Estos grupos, con un mayor apoyo del gobierno, participaron de manera activa en las actividades sociales, fundaron más de 450 establecimientos de atención médica, 270 jardines de infancia y mil clases separadas de este nivel, así como cuidaron a 11 mil 800 personas en situación desamparada.
Se han publicado un total de 12 periódicos y revistas religiosos y la mayoría de dichas organizaciones cuenta con su propio portal electrónico. Solo en cuatro años (2015-2019), emitieron hasta más de tres mil publicaciones sobre el tema, entre ellas unas 10 millones en versiones imprimidas y cuantiosos discos CD y DVD en varios idiomas. Se celebraron diferentes actividades internacionales en Vietnam como el Día de Vesak de las Naciones Unidas 2014, los 500 años de la Reforma protestante en 2017, y próximamente, el Día de Vesak de las Naciones Unidas 2019. Con ayuda del Estado, la Sangha Budista de Vietnam inició en 2017 la construcción de la Academia del Budismo Theravāda Jemer en la ciudad sureña de Can Tho.
En las provincias de Tay Nguyen (Altiplanicie Occidental) y Binh Phuoc (sur), actualmente se encuentran activos 33 organizaciones, sectas y grupos de protestantes. En el noroeste del país, hasta el 30 de junio de 2018, fueron fundadas 693 agrupaciones y ocho iglesias evangélicos.
Además, se han registrado varias asociaciones como lugar de práctica religiosa de las etnias minoritarias, tales como la Iglesia Luterana, la Federación de Iglesias Evangélicas de Vietnam y Iglesia Evangélica de Vietnam. El gobierno vietnamita también ofrece ayuda financiera para restaurar numerosos establecimientos de culto de los jemeres en particular y en todo el país en general.
Respecto a la libertad de expresión y de prensa, en la Ley de Prensa 2016 se establece de manera evidente este derecho del ciudadano y su plena capacidad de crear obras periodísticas, proporcionar y acceder a informaciones de prensa, criticar, proponer, reclamar y denunciar en la prensa. Este documento, igual que la Ley de Publicación 2012, reafirma el principio del Estado de permitir la impresión, publicación y emisión de ideas sin censura previa. Al mismo tiempo, el artículo 167 del Código Penal 2015 estipula sanciones para los delitos de “violar la libertad de expresión, prensa y de acceso a información”.
Nunca en Vietnam se ha visto tal desarrollo del periodismo como ahora. Se ha convertido en un foro público donde las organizaciones sociales y el pueblo pueden expresar sus ideas con libertad, así como en una herramienta para proteger los derechos del pueblo e interes de la sociedad, revisar y vigilar la implementación de la ley y políticas.
Hasta junio de 2018, en toda la nación operaban 857 instituciones de prensa con mil 119 publicaciones, 195 agencias periodísticas y revistas electrónicas, 67 radios y televisiones a nivel central y local con 184 canales; un total de mil 510 portales generalístas recibieron licencias del Ministerio de Información y Comunicación.
Se registran aproximadamente 650 millones de publicaciones cada año; 18 mil periodistas con carné profesional; 60 casas editoras; 91 canales televisivos por cable de pago, internet y satélite, entre ellos 58 emitidos del extranjero; y 20 agencias de prensa de otros países fueron licenciados para montar corresponsalías permanentes en Vietnam.
Cabe mencionar que la expansión del internet ha favorecido el acceso de la gente a informaciones, contribuyendo al desarrollo socioeconómico y cultural. WeAreSocial, una empresa especializada en estadísticas y evaluación de información digital y de sectores relacionados, reportó un total de 64 millones de internautas y 58 millones de cuentas Facebook en Vietnam en 2018, y que cada usuario dedica en promedio seis horas y 52 minutos a navegar por internet, entre otras cifras.