El Google calificó a la cueva Son Doong como una maravilla natural y “un fenómeno natural sin precedentes en la Tierra”, y dijo que esa publicación tiene como objetivo conmemorar la fecha del descubrimiento de ese destino en 2009.
Son Doong posee una anchura de 150 metros, una altitud de más de 200 metros y una longitud de casi nueve kilómetros. Se estima que su volumen llega a los 38,5 millones metros cúbicos.
El lugareño Ho Khanh encontró accidentalmente la entrada a la cueva en 1990.Sin embargo, en 2009, los expertos Howard y Deb Limbert de la Asociación británica de Investigación de Cuevas realizaron la primera encuesta oficial y concluyeron que Son Doong es la cueva más grande del mundo.
Desde entonces, Son Doong recibió a decenas de grupos de reporteros de grandes canales televisivos procedentes de Reino Unido, Alemania, Japón y Estados Unidos, quienes divulgaron la imagen de esta peculiar creación de la naturaleza a todo el mundo.
La gruta cuenta con un celestial sistema de estalactitas y estalagmitas, un bosque primitivo que alude al edén, y una “colección de perlas” de siglos de antigüedad. El descubrimiento de Son Doong también convirtió a Phong Nha-Ke Bang en “reino de las cuevas” reconocido universalmente.
Para entrar en la cueva, los aventureros deben superar un camino empinado, a lo largo de un río subterráneo.
Este tramo, con anchura de 92 metro, que posee una bóveda de 244 metros de ancho, puede contener un edificio de 40 pisos en Nueva York. Las estructuras aquí son más gigantescas y majestuosas que lo imaginable de los seres humanos.
Según los espeleólogos, la cueva apareció hace dos a cinco millones de años, debido a que el agua de un río socavaba un área de piedra caliza y creaba un gigante túnel subterráneo.
Una parte de la bóveda se desplomó hace años, posibilitando la entrada de la luz en la cueva para crear una diversificada flora, llamada “Edén” por los científicos.
En el Edén se encuentran una gran variedad de plantas tropicales y un vasto lago, lo que lo convierte en hogar ideal de numerosos animales. En este enorme espacio, se puede escuchar canciones de los pájaros escondidos en el bosque, o el eco de la corriente de agua que fluye entre las rocas.
A una profundidad de más de seis kilómetros, un acantilado gigante de estalactitas de unos 70 metros de alto es llamado “Gran Muralla de Vietnam”.