Hasta la tarde del 31 de mayo, el número de muertos ascendía a 17 y había seis heridos. Sin embargo, Basarnas indicó que el saldo, según lo informado por las familias de las víctimas, es provisional.
El lugar del derrumbe en Cirebon es peligroso y no cumple con las normas de seguridad para los trabajadores.
El Ministerio de Energía y Recursos Minerales declaró que investigará la causa del derrumbe y realizará una evaluación para identificar posibles deslizamientos de tierra.
Según Muhammad Wafid, director de la Agencia Geológica del Ministerio de Energía y Recursos Minerales de Indonesia, la regencia de Cirebon es una zona propensa a deslizamientos de tierra, especialmente bajo lluvias intensas y prolongadas. El método de socavación utilizado en la mina a cielo abierto y la pronunciada pendiente podrían haber contribuido al accidente.
Durante las labores de evacuación y búsqueda, los rescatistas deben prestar atención al clima y a las pendientes pronunciadas, y evitar realizar actividades durante o después de fuertes lluvias, ya que esta zona aún presenta el riesgo de nuevos deslizamientos de tierra que podrían golpearlos o sepultarlos, añadió.