Se trata de uno de los ritos tradicionales típicos de ese grupo étnico. Solo después de esta ceremonia, podrán afirmar que los padres lograron educar bien a su hijo.
Los Dao rojo celebran esta ceremonia para niños que acaban de cumplir 13 años. El rito de "capsac" a menudo se celebra en noviembre, diciembre o enero, y la “capsac” con doce velas encendidas es la más grande.
La ceremonia comenzó con el rito de presentación a los antepasados, durante el cual un cerdo es sacrificado. Luego, los hechiceros deben purificar el espacio antes de tocar el tambor para invitar a los antepasados a asistir a la ceremonia.
Después de murmurar oraciones y peticiones a las deidades, los jóvenes escucharon atentamente las lecciones morales para que sean considerados adolescentes y disfruten de un gran crédito de su familia, linaje y comunidad.
Los ritos luego dieron paso a las festividades, con un gran banquete reuniendo a todos los invitados.
Durante los últimos 100 años, la ceremonia de “capsac” con doce velas encendidas se ha organizado solo dos veces, dijo el hechicero Chao Duon Liem, quien añadió que muy pocas personas tuvieron oportunidad de asistir a ese rito.
Al compartir esta declaración, Chao Phin Nhan, otro residente, señaló que su linaje celebró una ceremonia "capsac" con doce velas hace un siglo.
Los 18 magos especializados en ceremonias de adoración guían a los jóvenes en la práctica de misteriosos ritos. En la víspera del día de la ceremonia, llevan a los jóvenes al bosque y les enseñan lecciones de moralidad. Los magos encienden 12 velas que simbolizan 12 estrellas en el cielo, que siguen desde los más jóvenes para aligerar y purificar sus almas.
En el cuarto día de la ceremonia, frente a la explanada de adoración del Emperador de Jade, el hechicero realizó un ritual reconociendo que el joven había alcanzado la edad de madurez.