Vietnam cosechó una victoria que resonó en el mundo entero, la de Dien Bien Phu, el 7 de mayo de 1954. Mientras, Cuba alcanzó el triunfo revolucionario el 1 de enero de 1959, el acontecimiento de mayor repercusión en América Latina en el siglo XX porque cambió el panorama político regional.
En los años 60 del siglo pasado, cuando el pueblo vietnamita estaba empeñado en cumplir la doble misión estratégica de construir el socialismo en el norte y luchar por la liberación del sur, al otro lado de la Tierra, Cuba enfrentaba las conspiraciones y las acciones de sabotaje de las potencias imperialistas.
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El Comandante en Jefe Fidel Castro y el pueblo cubano saludan al primer ministro vietnamita Pham Van Dong en La Habana, marzo de 1974. (Fotografía: VNA) |
El 2 de diciembre de 1960, el joven Gobierno Revolucionario dirigido por Fidel Castro hizo de Cuba el primer país del hemisferio occidental en establecer relaciones diplomáticas plenas con Vietnam.
Las similitudes en el proceso de construcción y defensa del país, así como en las aspiraciones e ideales revolucionarios, y la tradición heroica por la independencia, la liberación, la soberanía y la autodeterminación de ambas naciones, crean un vínculo especial y una base sólida para las especiales relaciones binacionales.
Superando los vaivenes de la historia durante más de 60 años, la amistad fiel y desinteresada, sembrada por el Presidente Ho Chi Minh y el Comandante en Jefe Fidel Castro, y cultivada por generaciones de dirigentes y ciudadanos de ambos países, se ha convertido en un patrimonio valioso en la causa de la defensa y la construcción del socialismo en los respectivos países.
