En ese momento, los soldados argelinos heridos de la 5ª Brigada del ejército francés esperaban, cuidadosamente vendados. Al despedirse de los vencedores, gritaron de repente: "¡Viva Ho Chi Minh! ¡Gracias! El órgano encargado de la propaganda y agitación dentro de las filas enemigas intensificó su trabajo en la fortificación de Ban Keo. En el interior del enclave se lanzaron octavillas del ejército vietnamita instando a los franceses a rendirse. También se emitió por los altavoces el llamamiento de rendición en el que se instaba a los extraviados en la fila enemiga a regresar a sus aldeas, abandonar al enemigo y deponer las armas, al tiempo que comunicaba la política de la indulgencia del Partido y del Gobierno de República Democrática de Vietnam.
Tras las derrotas en las bases de Him Lam y de Doc Lap, los franceses se dieron cuenta de las insuperables debilidades del "erizo de Dien Bien Phu" y compensaron rápidamente las pérdidas en personas y armas. El 16 de marzo de 1954, Cogny envió otra brigada de paracaidistas para reforzar a Muong Thanh. La llegada de ese refuerzo elevó la moral de la guarnición. Al mismo tiempo, el comandante de las fuerzas francesas en Indochina, Henri Navarre, dio instrucciones al general Fernand Gambiez, jefe del Estado Mayor de la Fuerza Expedicionaria Francesa, de poner en marcha urgentemente un plan para provocar lluvia artificial en la carretera desde la retaguardia hasta el frente de Dien Bien Phu con el fin de impedir que los suministros llegaran a las fuerzas vietnamitas.
En cuanto al ejército vietnamita, el 16 de marzo de 1954 el Mando del Frente de Dien Bien Phu convocó una conferencia del personal de campo para hacer balance de la Fase 1 y asignar tareas para la Fase 2 de la campaña. Paralelamente a la batalla de Dien Bien Phu, en el campo de operaciones del delta del norte vietnamita, guerrilleros y soldados vietnamitas se conjugron para volar un tren militar colonial francés en Van Lam (Hung Yen).