La medida se toma como parte del plan de respuesta preventiva ante condiciones meteorológicas extremas, con el objetivo de garantizar la seguridad de los vuelos, del personal y de las instalaciones aeroportuarias.
La CAAV también ha instruido a los aeropuertos de Noi Bai y Tho Xuan a mantenerse en alerta y actualizar sus planes operativos en función de los últimos reportes meteorológicos.
Las aerolíneas, por su parte, deberán notificar con antelación a los pasajeros sobre posibles modificaciones en sus itinerarios, facilitando así la reorganización de sus planes de viaje.
En cuanto a la Corporación de Gestión del Tránsito Aéreo de Vietnam, se ha ordenado movilizar todos los recursos técnicos y humanos para asegurar un monitoreo constante del clima y emitir pronósticos precisos sobre los efectos del tifón en las operaciones aéreas.
Las autoridades aeroportuarias regionales deberán reforzar las medidas de prevención de daños, con especial atención a la infraestructura técnica, el sistema de drenaje y la protección de aeronaves estacionadas. Se enfatiza la necesidad de cooperación activa con las autoridades locales para implementar eficazmente los planes de respuesta ante desastres.
Además, la CAAV ha instruido a las delegaciones del norte y centro del país a emitir directrices operativas y participar activamente en los esfuerzos de prevención y supervisión en sus respectivas zonas.
Una vez que el tifón haya pasado, se espera que los aeropuertos activen de inmediato sus planes de recuperación para reanudar las operaciones con normalidad.
La CAAV también alertó sobre posibles inundaciones en terminales que no se encuentran directamente en el trayecto del tifón, debido a lluvias prolongadas provocadas por su sistema de baja presión, y pidió mantener estrictos protocolos de reporte y comunicación para una respuesta oportuna.