A continuación, la Agencia Vietnamita de Noticias les presenta el texto íntegro del artículo:
GARANTIZAR LA ORGANIZACIÓN DE LAS ASAMBLEAS PARTIDISTAS A TODOS LOS NIVELES PARA EL MANDATO 2025-2030
To Lam, Secretario General Comité Central del Partido Comunista de Vietnam
Las asambleas partidistas a todos los niveles para el mandato 2025-2030 revisten especial importancia. No solo representan una gran y extensa actividad política en todo el Partido Comunista de Vietnam (PCV) y el pueblo, sino que también son una base fundamental para la exitosa organización del XIV Congreso Nacional del Partido. Más allá, esta serie de eventos constituye uno de los factores clave que crearán una base política sólida para llevar firmemente al país a una nueva era, la de desarrollo, riqueza y prosperidad, que esté hombro con hombro con las potencias mundiales como lo deseaba el querido Presidente Ho Chi Minh y aspira toda la nación.
La práctica de la Revolución vietnamita muestra que las asambleas partidistas a todos los niveles desempeñan un papel orientador y pilar, con profunda influencia en todo el Partido y la sociedad. En este ciclo, las asambleas partidistas a diferentes niveles tienen tres tareas esenciales: debatir y aprobar los documentos de la asamblea de su respectivo nivel, así como ofrecer comentarios sobre el borrador de los documentos de las asambleas de niveles superiores, incluidos los del XIV Congreso del Partido; seleccionar a los candidatos para los comités del partido a todos los niveles; y perfeccionar el personal en los órganos de liderazgo del Partido desde la base hasta el nivel central. Estos temas son fundamentales, ya que están directamente relacionados con el papel de liderazgo, la gobernanza y la capacidad de lucha del Partido, la formulación de políticas, directrices, estrategias y medidas de liderazgo; la decisión sobre la fuerza interna del Partido y del sistema político; todas las actividades de dirección de las organizaciones partidistas en todos los niveles en el próximo mandato, así como la fuerza de toda la nación en el futuro.
El PCV es el partido gobernante, que ejerce su liderazgo mediante políticas. Los documentos de las asambleas partidistas a todos los niveles son la concreción de las ideas y directrices del Partido en un sistema de soluciones viables pensadas desde la práctica de los sectores, localidades, organismos y unidades; tienen el valor de orientar el liderazgo y la superación de las deficiencias e insuficiencias, mediante la optimización de las oportunidades y ventajas, la eliminación a fondo los cuellos de botella y barreras, así como la movilización al máximo de la participación de los cuadros, militantes y pobladores, en aras de crear una gran fuerza para cumplimentar y sobrepasar las metas establecidas, contribuir a la consecución exitosa de las metas, objetivos y planes fijados por el Comité Central del PCV y los comités partidistas de niveles superiores. Por tal motivo, la meta que los comités partidistas a todos los niveles deben lograr es asegurar la calidad de las opiniones sobre los documentos de las asambleas de sus respectivos niveles, los proyectos de documentos de los niveles superiores y del XIV Congreso Nacional del PCV, especialmente proponer soluciones para abordar las cuestiones que surjan de las actividades a nivel de base, del aliento de la vida social de cada localidad, incluso de cada aldea, comunidad e individuo para crear motivación, dinamismo y fuerte difusión en todo el país.
El personal de los comités partidistas también deviene como equipo de dirección y gestión clave de cada ministerio, sector, localidad, agencia y unidad; actúan como el puente entre el Partido, el Estado y el pueblo, así como la fuerza que dirige, guía, organiza, ejecuta y decide la realización de las directrices y lineamientos del Partido y las políticas y leyes del Estado; a medida que estudia la situación y propone al Partido y el Estado la elaboración de políticas y estrategias que estén en consonancia con las aspiraciones e intereses legítimos del pueblo. Los secretarios, subsecretarios y miembros de los comités partidistas constituyen siempre factores importantes que deciden los resultados de las labores políticas, la estabilidad, el desarrollo y la fortaleza de las localidades, agencias y unidades, tanto en el corto como en el largo plazo.
Para organizar con éxito las asambleas partidistas a todos los niveles para el mandato 2025-2030, los comités del PCV deben seguir de cerca la Directiva No. 35-CT/TW, emitida el 14 de junio de 2024 por el Buró Político sobre la organización de las asambleas partidistas a todos los niveles, con miras al XIV Congreso Nacional del PCV, y la Conclusión No. 118 KL/TW, promulgada el 18 de enero de 2025 por el Buró Político sobre la modificación y complementación de la Directiva 35. Además, las Comisiones de Organización, de Inspección, de Propaganda y Educación y la Oficina del Comité Central del PCV adoptaron 21 documentos instructivos relacionados que los funcionarios deben considerarlos como manuales para su implementación.
En el contexto que estamos cumpliendo activamente la Resolución No. 18 del Buró Político sobre la restructuración y racionalización de los organismos y unidades del sistema político, los comités partidistas en todos los niveles necesitan perfeccionar rápidamente su organización, poner en funcionamiento el nuevo aparato y continuar racionalizando la estructura interna de cada agencia, unidad y localidad. Las cuatro instancias partidistas recién creadas son las del bloque de los órganos del Comité Central del PCV, del Gobierno, de la Asamblea Nacional y del Frente de la Patria de Vietnam. Ellas, junto con algunas Comisiones del Comité Central del Partido recientemente reestructuradas y los nuevos Comités y células del PCV en algunos ministerios, provincias y ciudades, basados en sus funciones, tareas y estructura, deben estabilizar pronto su organización y cumplir con el Estatuto del PCV y las nuevas regulaciones del Comité Central en la gestión de su trabajo así como en la celebración de las asambleas partidistas.
Para llevar a cabo de manera efectiva las asambleas del Partido a todos los niveles, los comités partidistas deben enfocarse en tres aspectos clave:
Primero, es necesario unificar la percepción de que los logros alcanzados por el país después de 95 años bajo la dirección del Partido, especialmente después de 40 años de Doi moi (Renovación) son enormemente significativos y motivo de orgullo. Sin embargo, nuestro país sigue enfrentando muchas dificultades y desafíos que todo el Partido, el pueblo y el Ejército deben afrontar con más esfuerzo, unidad y determinación para superarlos. En particular, las asambleas partidistas a todos los niveles del mandato 2025-2030 debe ser la fuerza principal en la resolución efectiva de estos problemas. Existen muchas barreras y obstáculos institucionales que llevan años sin ser resueltos o eliminados. Además, aún persisten el riesgo de estancamiento, de rezago, especialmente en la economía, en ciencia y tecnología, y el peligro de caer en la trampa de los ingresos medios. Recientemente, desastres naturales, tormentas e inundaciones y otros efectos del cambio climático y del deterioro ambiental han dejado consecuencias graves en muchas localidades. La corrupción, el despilfarro y las actitudes negativas no se han erradicado; la situación de decir una cosa y hacer otra, de hablar mucho y hacer poco, de optimismo desmedido, junto con informes no verídicos, funcionarios sin capacidad ni ejemplaridad, localismo y faccionalismo, son puntos débiles que las fuerzas enemigas y reaccionarias explotan para difundir propaganda en contra, con el fin de implementar la evolución pacífica y promover la auto-evolución y auto-transformación dentro de las filas partidistas para socavar la confianza del pueblo en el Partido, el Estado y el régimen. Estos riesgos y desafíos amenazan directamente el cumplimiento de los objetivos estratégicos de 100 años bajo la dirección del Partido y el centenario de fundación del país, así como la meta de que, en medio del siglo XXI, Vietnam sea un país desarrollado con altos ingresos. Es necesario identificar con precisión “peligro y oportunidad”, establecer metas claras para unificar la determinación política, con pasos y acciones correctas y decididas, para resolver eficazmente los problemas, eliminar obstáculos y desbloquear todos los recursos disponibles, aprovechando al máximo el potencial y las ventajas de cada sector, área y localidad.
Segundo, en cuanto a la elaboración de los documentos y la participación en las discusiones sobre los mismos en las asambleas partidistas de niveles superiores, así como en los documentos del XIV Congreso Nacional del Partido, el Informe Político que se presente ante las asambleas del Partido en todos los niveles debe alinearse con el espíritu de los documentos propuestos para el XIV Congreso. Debe enfocarse en analizar y evaluar de manera objetiva la implementación de las resoluciones del último Congreso; reflejar con precisión la situación y realidad del desarrollo en las localidades, sectores, áreas, agencias y unidades correspondientes. Debe resaltar los logros más destacados en la dirección del Partido, adoptando una actitud de reconocimiento de la verdad, evaluación de la realidad y transparencia. Es fundamental señalar de manera honesta las limitaciones, debilidades y deficiencias que persisten, especialmente aquellos obstáculos y restricciones al desarrollo que aún no se han resuelto. Resulta necesario realizar un análisis profundo de las causas de los logros y las limitaciones, especialmente en lo que respecta a las políticas, medidas y soluciones adoptadas en cada unidad y localidad; la organización en la implementación; la influencia crucial de los factores humanos y el trabajo de los cuadros, así como la participación y el apoyo del pueblo. Es importante resumir los modelos nuevos y buenas prácticas, extrayendo así las lecciones valiosas para el desarrollo. Además, se necesita estudiar de manera proactiva, comprender y anticipar la situación, realizando un análisis profundo de los problemas que afectan directamente a los sectores, niveles, localidades y agencias, y determinar claramente las ventajas y el potencial de desarrollo, con el lema Visión nacional, acción local, acompañamiento empresarial, responsabilidad ciudadana. Esto permitirá definir las orientaciones, tareas clave, puntos de inflexión y estrategias adecuadas, con el fin de impulsar el desarrollo económico, cultural y social del país, teniendo como objetivo final mejorar la calidad de vida material y espiritual, así como la felicidad del pueblo.
El informe de evaluación de la dirección de los comités partidistas debe ser coherente con el Informe Político. No debe ser una copia mecánica o superficial, ni una revisión de forma. La evaluación de los comités partidistas debe ajustarse al reglamento de trabajo, al programa de acción y a los resultados de la implementación de las resoluciones de las asambleas del Partido. Además, debe considerar la orientación de los comités partidistas de nivel superior y la situación específica de cada localidad, agencia y unidad. Se debe tener en cuenta también el cumplimiento de las resoluciones y conclusiones de los cuartos plenos del Comité Central de los mandatos XI, XII y XIII, en lo que respecta al estudio y la aplicación del pensamiento, ética y estilo de Ho Chi Minh. Asimismo, se deben evaluar las regulaciones sobre las acciones prohibidas para los miembros del Partido y las normativas relacionadas con la ejemplaridad de los cuadros, especialmente los líderes. Se debe evaluar el trabajo de liderazgo, dirección y ejecución de las tareas políticas en función de los resultados concretos obtenidos, así como el nivel de satisfacción de la población. Es necesario ser directo y objetivo al señalar las limitaciones y deficiencias, el grado de corrección de los problemas detectados, con un enfoque de autocrítica y crítica constructiva, sin concesiones ni evasión. Es importante identificar y aclarar las causas, especialmente las subjetivas, para aprender de ellas y formular planes y medidas efectivas para corregir y superar estas deficiencias en el período 2025-2030. El informe de evaluación debe relacionar la responsabilidad colectiva con la responsabilidad individual, particularmente de los líderes y las personas encargadas de las áreas y localidades. Esto se considerará como un criterio fundamental para evaluar el desempeño de los miembros de los comités partidistas durante su mandato y para proponer candidatos para el próximo período. Es fundamental comprender que la evaluación representa una oportunidad para reforzar la comprensión mutua, la unidad, la cohesión y mejorar el ambiente laboral. Bajo ninguna circunstancia debe usarse la evaluación para fomentar conflictos internos, intentar destruir a otros o dañar la reputación de los cuadros y miembros del Partido.
Es necesario discutir y aportar ideas de manera sustantiva, eficaz y enfocada al borrador de los documentos del XIV Congreso del Partido y los documentos de las asambleas partidistas de niveles superiores, evitando comentarios superficiales. Basándose en las condiciones específicas de la organización del Partido y el congreso, se debe orientar y sugerir los temas fundamentales, los nuevos temas y aquellos que presenten varias opciones para su discusión. Se debe elegir la forma adecuada de intercambio y retroalimentación para recibir y asimilar ideas valiosas y de calidad. Durante el proceso de discusión y deliberación, es fundamental ser abierto, escuchar y respetar las opiniones de los demás, especialmente sobre los temas nuevos y complejos, al tiempo que se defienden firmemente las cuestiones de principios, sin permitir que se desvíen o vacilen. Siempre se debe mantener la alerta y la precaución ante posibles intentos de manipulación para distorsionar o sabotear el proceso.
Tercero, se debe poner un énfasis especial en la preparación del personal para el Congreso Nacional del Partido. Es necesario tener una conciencia profunda de que la preparación del personal no es solo para un congreso; sino también para el desarrollo futuro de la organización del Partido y de los sectores, áreas, localidades, instituciones y unidades. En términos más amplios, es el destino del Partido, la supervivencia del régimen y el desarrollo de la nación. Este es un trabajo que los funcionarios, miembros del Partido y el pueblo siguen con atención; y también un tema en el que los elementos adversarios y oportunistas políticos tratan de influir de cualquier manera, difundiendo rumores y tergiversaciones para dividir el interior del Partido.
En cuanto a la estructura de los comités partidistas, se debe garantizar su liderazgo directo y completo sobre las áreas y sectores importantes; priorizando la calidad, sin bajar los estándares por razones de estructura; y no es necesario que todas las localidades, sectores o agencias tengan personas participando en los comités partidistas. Los miembros seleccionados en ese órgano rector deben ser realmente los núcleos del liderazgo político, representando a los miembros del Partido y ganándose la confianza y el respeto de la gente; estar a la altura de ser miembros del equipo de asesoría y estar unidos, con un alto grado de acuerdo en la voluntad y en la acción, siendo realmente íntegros, firmes y leales. Es necesario resaltar la responsabilidad de los jefes de los comités partidistas en proponer y presentar personal, especialmente para la persona que sucederá según las nuevas regulaciones del Comité Central del Partido.
La preparación del personal debe combinar de manera armónica los recursos humanos locales con la rotación de personal de otras áreas. En las localidades o unidades que exista una estructura del comité partidista, pero que aún no cuenten con personal preparado, el comité superior correspondiente debe revisar y movilizar personal de otras áreas que cumpla con los estándares, condiciones y requisitos de las tareas políticas de la localidad o unidad, para presentarlo y designarlo como miembro del comité o para su inclusión posterior al congreso. Es importante alcanzar una proporción de féminas en los comités partidistas de al menos el 15 por ciento y tener mujeres en el Buró Ejecutivo; una presencia de jóvenes del 10 por ciento o más, y asegurando una tasa adecuada de miembros de minorías étnicas en los comités según las características y estructuras de las poblaciones y las condiciones específicas de cada localidad y unidad.
Además de cumplir con los estatutos del Partido y las regulaciones vigentes, el trabajo de personal de los comités partidistas debe llevarse a cabo de manera ordenada, científica y humana. Se debe preparar cuidadosamente tanto al personal de los comités como a los delegados que asistirán a las asambleas partidistas de nivel superior. La presentación y selección del personal debe garantizar los estándares y condiciones; basándose en la planificación, reglamentos y regulaciones, asegurando la democracia, la transparencia y la claridad; basándose en las cualidades políticas, la ética, el estilo de vida, el nivel profesional, la reputación, los logros y la efectividad en el trabajo; nunca seleccionando a funcionarios que no cuenten con la confianza de la población, ni a aquellos que lideran de manera conformista, que solo buscan la paz y la armonía para conseguir votos. El personal que participe en los comités del Partido y los delegados seleccionados para asistir a las asambleas partidistas superiores deben ser la élite del Partido, verdaderamente ejemplares en cualidades políticas, integridad, inteligencia; que tienen una visión y pensamiento estratégico; son responsables, con pensamiento innovador, capaces de aprovechar oportunidades, dispuestos a pensar, actuar y asumir responsabilidades por el bien común, sin evitar ni ser pasivos frente a nuevos problemas que surjan; tienen habilidades prácticas, capacidad de liderazgo y gestión; son audaces, creativos en aportar ideas para ayudar al congreso a tomar decisiones correctas que aborden nuevos y complejos desafíos para el desarrollo del país y la defensa de la patria.
El trabajo de personal debe realizarse de acuerdo con un proceso riguroso, científico y coherente, siguiendo las directrices del Comité Central del Partido; evitando métodos simplistas, arbitrarios, sin principios, o actitudes rígidas y desconectadas de la realidad; asegurando que se seleccionen las mejores personas, las más dignas, sin omitir a aquellos que realmente tienen virtudes, talento, condiciones y cumplen con los estándares, al mismo tiempo que combaten firmemente cualquier manifestación de oportunismo, ambición de poder, intereses personales o de grupo, localismo y amiguismo. El personal es la raíz de todos los problemas, por lo que, en el proceso de selección, además de descubrir lo correcto y lo adecuado, se debe hacer un esfuerzo para no dejar de encontrar talento, porque no usar el talento es un derroche de recursos y potencial humano.
En el proceso de preparación y organización del Congreso, especialmente en los nuevos comités del Partido o aquellos en proceso de fortalecerse, se deben mantener firmes los principios organizativos y operativos del Partido, especialmente el de democracia centralizada, unidad y solidaridad, autocrítica y crítica; y comprender profundamente los principios de firmeza y renovación, herencia y desarrollo para preparar cuidadosamente, de manera integral y detallada, todos los aspectos del congreso, enfocándose tanto en la preparación como en el cumplimiento de las tareas políticas. La organización debe realizarse de manera práctica, económica, evitando el despilfarro y la ostentación, asegurando que sea solemne y significativo; estar vinculado a la renovación en la forma de construir, emitir y aplicar las resoluciones; reforzar la delegación de poderes y responsabilidades, reduciendo la cantidad de comités y organismos intermedios; promover la iniciativa y el ejemplo de los funcionarios y miembros del Partido, así como la participación y apoyo activo de la población. Se debe trabajar proactivamente en la tarea de la ideología, la información y la propaganda para crear unidad en todo el comité y consenso en la comunidad, fortaleciendo la confianza de los funcionarios, militantes y la población en la organización del Partido de base. Es necesario crear condiciones y un entorno favorable para potenciar la inteligencia y la participación de todos los sectores de la población en la construcción de documentos y la gestión del personal, contribuyendo de manera positiva y efectiva al éxito del congreso, y llevando rápidamente las resoluciones del congreso del Partido a la práctica, para traer una vida próspera, libre y feliz a todos los ciudadanos.