Los reclamos conflictivos (de soberanía) solo pueden resolverse pacíficamente mediante la adhesión a enfoques pacíficos y basados en la ley, resaltó el canciller filipino en encuentros y seminarios en el marco de la 59 Conferencia de Seguridad de Múnich en Alemania.
Tal punto de vista de Filipinas se formalizó en la Declaración de Manila de 1982 sobre la solución pacífica de controversias internacionales, que ha recibido el apoyo de la comunidad internacional, dijo.
De acuerdo con el diplomático filipino, las tensiones causadas por incidentes y acciones agresivas incompatibles con la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar del Este (DOC) de 2002 no conducen a promover la paz y la estabilidad.
Pidió la preservación y el fortalecimiento del orden global sobre la base de las leyes internacionales y el multilateralismo en medio de las dificultades causadas por la recuperación posterior a la pandemia, el conflicto Rusia-Ucrania y la escalada rivalidad estratégica entre Estados Unidos y China.
Según Manalo, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) podría iniciar un abierto debate sobre las normas y el orden aplicables en el dominio de navegación marítima y el Mar del Este en favor de elevar la conciencia sobre la importancia de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 y también mantener un orden basado en reglas para que cualquier disputa o conflicto se resuelva a través del estado de derecho y medios pacíficos en lugar de medidas de fuerza y acciones agresivas.
