El espectáculo en Voronezh dejó una profunda impresión no solo en la audiencia rusa sino también en la comunidad vietnamita allí, incluida la segunda y tercera generación de vietnamitas que viven en la ciudad.
El jefe de la compañía, Tran Thanh Hien, reveló que debido a la limitación del número de los miembros de la delegación, los artistas tuvieron que trabajar duro, pero los comentarios entusiastas de los espectadores les han motivado mucho.
Las actuaciones se inspiraron principalmente en leyendas e historias populares de los vietnamitas, como el tío Teu, la danza del dragón, las carreras de botes, la leyenda de la espada restituida del lago Hoan Kiem y las danzas del fénix y del león.