Según el informe de actualización económica del BM para Vietnam publicado hoy, el repunte de las exportaciones, impulsado por la creciente demanda mundial de productos tecnológicos, contribuyó al crecimiento en 2024.
No obstante, se espera que este impulso se desacelere en el presente año. Las principales incertidumbres sobre las perspectivas de desarrollo provienen de un crecimiento mundial más lento de lo anticipado y de las tensiones comerciales, especialmente entre los principales socios comerciales de Vietnam.
Para afrontar la creciente incertidumbre, el BM sugiere diversas estrategias para sostener el crecimiento, como incrementar la inversión pública, abordar las vulnerabilidades del sector financiero, fortalecer la resiliencia energética e impulsar las reformas estructurales.
A su vez, se prevé que las entradas de inversión extranjera directa (IED) se mantendrán estables, con unos 25 mil millones de dólares desembolsados, lo que refleja el continuo atractivo de Vietnam para los inversores internacionales.
Un aumento en la inversión pública y una recuperación acelerada del mercado inmobiliario, gracias a una aprobación más ágil de proyectos, podrían impulsar la demanda interna, compensando parcialmente los riesgos provenientes del exterior.
“La economía de Vietnam mantendrá un sólido crecimiento durante los próximos dos años, pero puede utilizar su margen fiscal para estar mejor preparado ante la creciente incertidumbre”, destacó Mariam J. Sherman, directora del Banco Mundial para Vietnam, Camboya y Laos, durante una conferencia de prensa.
“La inversión pública, especialmente en infraestructura urbana, de transporte y energética, será clave para fomentar este crecimiento, siempre que las autoridades puedan ampliarla y garantizar la eficiencia del gasto”, añadió.
El informe también destacó el impulso de Vietnam hacia la movilidad eléctrica como un paso fundamental para crear un sector del transporte más ecológico y reducir la contaminación del aire.
En 2021, el transporte generó 32,9 millones de toneladas de emisiones equivalentes de CO2 (CO2e), lo que representó el 7,2 por ciento del total de las emisiones de gases de efecto invernadero del país.
Para alcanzar su meta de cero emisiones netas para 2050, Vietnam deberá priorizar la electrificación del transporte. La transición a vehículos eléctricos podría reducir las emisiones netas en 2,2 millones de toneladas de CO2e para 2050, incluso con la actual combinación de la red eléctrica.
Además, esta transición podría generar hasta 6,5 millones de empleos para 2050, particularmente en la fabricación de baterías y el desarrollo de infraestructuras de carga.
Para acelerar la adopción de vehículos eléctricos en el sector de las motos, el informe recomienda varias medidas, como implementar normas de seguridad más estrictas, fomentar la adopción de baterías de alto rendimiento, expandir las estaciones de carga e intercambio de baterías, y ofrecer opciones de financiamiento accesibles para contrarrestar los costos iniciales.
Con el objetivo de facilitar la adopción masiva de vehículos eléctricos después de 2035, Vietnam deberá preparar su sistema eléctrico para una mayor demanda de electricidad y establecer una red de carga rápida durante la próxima década, señala el informe.