El vicegobernador del BEV Pham Thanh Ha hizo esa valoración durante una rueda de prensa efectuada ayer en Hanói acerca de la situación socioeconómica en 10 meses y en octubre de 2022, según la Agencia Vietnamita de Noticias.
Añadió Thanh Ha que todos los bancos centrales en el mundo han subido las tasas de interés en pos de combatir la inflación interna y apoyar la devaluación de la moneda nacional frente al dólar estadounidense.
Enfatizó, además, que esa decisión busca garantizar la seguridad de la liquidez y la capacidad de movilizar capitales. El BEV, por su parte, exige a las instituciones de crédito a priorizar los segmentos de clientes prioritarios y empresas.
Desde principios de año, BEV fijó una meta de lograr un crecimiento crediticio del 14 por ciento, superior al nivel de los dos años anteriores, y de hecho, se registró un aumento al respecto desde los primeros meses de 2022, a diferencia de 2020 y 2021.
En ese contexto marcado por la presión generada por la necesidad de garantizar capital en pos de asegurar la liquidez para los bancos y también la capacidad de conceder créditos para la economía, el BEV reajustó la tasa de interés máxima desde septiembre.