Según la evaluación de Time Out, Vietnam reúne numerosos factores que buscan los viajeros en esta época del año: un clima agradable, paisajes diversos, una profunda riqueza cultural y gastronómica, así como experiencias lo suficientemente diferentes sin ser excesivamente ajenas.
El invierno en Vietnam no se caracteriza por la nieve ni por el frío glacial, sino por una transición suave de estaciones. Mientras que en el norte hace un frío ligero, ideal para explorar el casco antiguo de Hanói, las montañas y las tierras altas, en el centro y el sur brilla el sol, perfecto para el turismo de playa, el ecoturismo y las actividades al aire libre.
Esta diversidad climática permite a los turistas elegir un solo destino y disfrutar de múltiples “inviernos”: desde la niebla flotante de las provincias del noroeste hasta el sol suave de las playas del centro del país o el ambiente relajado de la región suroeste.
Los rasgos culturales y la gastronomía son otros puntos a favor que posicionan a Vietnam como un destino destacado durante la temporada invernal. Es el momento ideal para disfrutar de platos con caldo, postres calientes e infusiones, que ejercen su encanto tanto por su sabor como por las historias culturales que los acompañan.
Quienes visitan Vietnam en invierno también pueden vivir la atmósfera de las festividades de fin de año, el ambiente previo al Tet (Año Nuevo Lunar) y observar la vida cotidiana, las creencias y las costumbres tradicionales; experiencias que pocos destinos asiáticos ofrecen de manera tan completa en un solo viaje.
El reconocimiento de Time Out coincide con un momento en que el turismo en Vietnam está en pleno auge. Según la Autoridad Nacional de Turismo, en 2025 el país recibió más de 20 millones de visitantes internacionales, un aumento interanual del 20,9 por ciento y muy por encima de los niveles previos a la pandemia de Covid-19.
Este crecimiento se apoya en un proceso de renovación del ecosistema turístico. Además de las ofertas tradicionales de turismo de playa, descanso, cultura e historia, el sector está impulsando el turismo verde, comunitario y experiencial, que ofrece viajes más profundos y significativos.
Esta estrategia contribuye a consolidar la imagen de Vietnam como un destino acogedor, abierto, cada vez más profesional y alineado con las tendencias globales del turismo sostenible.
La presencia en clasificaciones prestigiosas como la de Time Out es el resultado de un proceso que abarca políticas, productos y experiencias reales de los visitantes.
En un contexto en el que el turismo mundial se reconfigura tras profundas transformaciones, Vietnam acrecienta la oportunidad de afianzar su posición en el mapa turístico internacional y superar la reciente marca de 20 millones de visitantes internacionales.