En un reciente informe sobre la macroeconomía de Vietnam, la entidad bancaria mantuvo su pronóstico para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación indochina en un 6,7 por ciento en 2022 en el contexto de que los indicadores económicos se ven recuperados ampliamente.
También indicó que el proceso de recuperación económica se desarrollará más fuertemente a finales del segundo trimestre del año, gracias a las señales positivas en el sector turístico y la demanda interna.
Sin embargo, según los expertos de Standard Chartered, Vietnam podrá enfrentar riesgos a corto plazo, especialmente los relacionados con la recuperación de la industria del ocio y la situación del Covid-19.
Tim Leelahaphan, economista de la institución en Tailandia y Vietnam, compartió que el país indochino ha levantado las regulaciones de cuarentena para los visitantes internacionales a partir de mediados de marzo pasado, y al mismo tiempo, dijo que la reapertura de la industria sin humo que aporta un 10 por ciento del PIB será un factor que necesita observarse y evaluarse estrictamente en la etapa entre abril y junio luego de dos años de suspensión debido a la pandemia.
La entrada de Inversión Extranjera Directa (IED) en Vietnam ha comenzado a recuperarse hasta el momento después de una desaceleración en 2021 y se espera que esa tendencia continúe en los próximos tiempos, particularmente en los campos de producción y suministro de electricidad, gasolina, petróleo y equipos de aire acondicionado.
Los inversores foráneos continúan siendo la principal fuerza impulsora para que la nación indochina contribuya a la cadena de suministro global, agregó.
Numerosas grandes empresas tecnológicas en el mundo han trasladado o planean cambiar sus actividades de producción desde China a Vietnam en los últimos años con el objetivo de diversificar sus cadenas de suministro, señaló.
Vietnam sigue siendo un centro de fabricación regional en áreas como electrónica, confecciones textiles y calzado, agregó Tim Leelahaphan.
Además, Standard Chartered mantuvo su pronóstico en términos de inflación en un 4,2 por ciento en 2022 y un 5,5 por ciento en 2023 para Vietnam, país que podrá registrar un superávit en la cuenta corriente en este año a medida que el turismo se recupere.
Con anterioridad, el Banco Asiático para el Desarrollo (BAD) dio a conocer que la economía vietnamita podrá alcanzar un crecimiento del 6,5 por ciento en 2022 y del 6,7 por ciento en 2023, gracias a la alta tasa de vacunación contra el Covid-19, el impulso del comercio y la amplia implementación de las políticas fiscales y monetarias.
Por otro lado, el Banco Mundial prevé que el crecimiento económico de Vietnam alcance un 5,3 en 2022.
