En un debate abierto la víspera en la Asamblea General de la ONU sobre la situación en Medio Oriente centrado en el actual conflicto entre Israel y el movimiento Hamás, el diplomático vietnamita pidió a todas las partes que cesen el fuego de inmediato, ejerzan la máxima moderación, respeten las normas humanitarias internacionales y apliquen todas las medidas necesarias para proteger la vida de las personas, incluyendo garantizar la seguridad y la liberación inmediata de todos los rehenes y minimizar los daños a la infraestructura civil esencial de acuerdo con la Resolución 2573 del Consejo de Seguridad de la ONU.
También llamó a la comunidad internacional, especialmente a todas las partes relevantes, a crear condiciones favorables para poner fin a los combates, reanudar el diálogo y las negociaciones, permitir el acceso humanitario y desplegar operaciones de ayuda humanitaria oportunas y sin obstáculos para llegar a las personas que necesitan asistencia, garantizando al mismo tiempo la seguridad de los trabajadores de ayuda humanitaria.
Dang Hoang Giang expresó su apoyo a los esfuerzos de mediación de la ONU y sus países miembros, así como de las organizaciones internacionales y regionales, destacando la necesidad de detener las actividades a largo plazo que incitan a más violencia y odio entre las dos partes, detener la expansión de asentamientos en Cisjordania, la destrucción de viviendas y la expulsión de palestinos, y respetar el status quo de los lugares sagrados en Jerusalén.
El representante vietnamita propuso reanudar las actividades del Cuarteto de Medio Oriente, instó a las partes a regresar a las negociaciones para resolver las causas profundas, con el objetivo de lograr una solución de dos Estados de acuerdo con el derecho internacional y las resoluciones pertinentes de la ONU, incluido el establecimiento de un Estado palestino con Jerusalén Este como su capital, coexistiendo pacíficamente con el Estado de Israel, con fronteras reconocidas internacionalmente basadas en las fronteras anteriores a 1967.
También pidió a la ONU y al Consejo de Seguridad de la ONU que se esfuercen por lograr un mensaje unificado y constructivo, ayudando a promover los esfuerzos para reducir las tensiones, poner fin a los combates, proteger a los civiles y apoyar la reanudación del diálogo y las negociaciones.
En los debates abiertos, muchos países expresaron su preocupación por el aumento de la tensión y el riesgo de que se extendiera a la región, protestaron contra los ataques que causaron grandes víctimas entre los civiles y las graves situaciones humanitarias cuando la Franja de Gaza quedó completamente bloqueada sin electricidad, agua, medicinas y otras necesidades durante días. La mayoría de los países pidieron un alto al fuego inmediato y el establecimiento de un corredor humanitario que permita el transporte de ayuda esencial desde el exterior a la Franja de Gaza.
En su intervención, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, instó a todas las partes a respetar sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario, la protección de los civiles y las obras civiles.