Este esfuerzo forma parte de la estrategia para fortalecer la infraestructura digital, asegurando una conexión internacional de alta capacidad, velocidad, sostenibilidad y seguridad. Así, se impulsa la transformación digital del país, el crecimiento de la economía y la sociedad digitales, además de una mayor integración global.
Según la Estrategia de Infraestructura Digital al 2025, con visión al 2030, Vietnam planea poner en marcha al menos dos nuevos cables submarinos internacionales para 2025 y seis más para 2030, alcanzando una capacidad total de al menos 350 Tbps.
También busca operar un cable submarino de propiedad nacional y al menos una línea terrestre internacional.
Para lograrlo y garantizar una red de telecomunicaciones segura y sostenible, las empresas locales están invirtiendo fuerte en nuevas rutas submarinas.
Por ejemplo, la Corporación Viettel Networks acaba de estrenar el cable submarino Asia Direct Cable (ADC), con una capacidad máxima de 50 Tbps, la mayor en Vietnam, superando en un 125 por ciento la capacidad combinada de los cinco cables submarinos actuales (IA, AAE-1, APG, AAG y SMW-3).
El cable ADC, de nueve mil 800 kilómetros y finalizado en diciembre de 2024, conecta siete países y territorios: Vietnam, China, Hong Kong (China), Tailandia, Filipinas, Singapur y Japón.
En la nación indochina, aterriza en la ciudad de Quy Nhon. La inversión total en el proyecto ADC asciende a 290 millones de dólares, con la colaboración de nueve importantes empresas de telecomunicaciones, entre ellas Viettel, Softbank (Japón), Tata (India), Singtel (Singapur), China Telecommunications Corporation, China Telecom Global y China Unicom (China), National Telecom (Tailandia) y PLDT (Filipinas).
Viettel es el único operador vietnamita que participa en la inversión del cable.
A diferencia de las rutas existentes, el ADC se conecta directamente con los tres principales nodos de internet en Asia: Singapur, Hong Kong (China) y Japón.
Antes de este cable, Vietnam dependía de cinco grandes líneas submarinas internacionales y una menor, la TVH (Tailandia-Vietnam-Hong Kong), de tres mil 367 kilómetros.
Los cables actuales, muchos en operación desde hace años, suelen presentar fallos técnicos que afectan la calidad de la conexión a internet internacional.
La llegada del ADC permitirá soportar aplicaciones de gran ancho de banda, como 5G, computación en la nube, Internet de las cosas e inteligencia artificial.
Además, este cable no solo alivia la carga de las rutas existentes, sino que fortalece la seguridad de la red, protege la información nacional y eleva la calidad de los servicios de telecomunicaciones de Viettel.