La localidad también intensificará la aplicación de los avances científico-tecnológicos en las labores de conservación, y seguirá aplicando estrictamente las normas de gestión estatal, así como la Convención del Patrimonio Mundial y la Ley del Patrimonio Cultural.
Phan Ho, director de la Junta Directiva del Sitio del Patrimonio Cultural Mundial de My Son, destacó que desde que el santuario ganó el reconocimiento de la Unesco en 1999, muchas organizaciones e individuos, tanto en el país como en el extranjero, se han unido en la preservación. Entre ellos se encuentran la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), JICA (Japón), la Fundación Lerici (Italia), la Universidad de Milán y el Servicio Arqueológico de la India (ASI).
Además de los productos turísticos existentes en los templos-torre, la provincia desarrollará otros nuevos en las áreas de amortiguamiento y núcleo este año, incluidos productos de patrimonio cultural y ecoturismo en un bosque de mil 158 hectáreas, agregó.
También se fortalecerá la conectividad entre el santuario y otros sitios patrimoniales en la región central y los principales centros turísticos, dijo, y agregó que la Junta Directiva mejorará la calidad del personal, especialmente de los guías turísticos y diversificará los servicios en el santuario.
Ubicado en una zona montañosa en el distrito de Duy Xuyen, en la provincia de Quang Nam, el santuario de My Son fue reconocido por la Unesco como Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1999.
Se trata del complejo arquitectónico más famoso del pueblo Cham en Vietnam, dividido en bloques, cada uno de los cuales tiene un templo principal y varios pequeños alrededor.
La construcción del santuario comenzó en el siglo IV, bajo el reinado de Bhadravarman, para la adoración del dios Shiva-Bhadresvara. Más tarde, este templo fue destruido.
A principios del siglo VII, el rey Sambhuvarman lo reconstruyó. Cada nuevo monarca venía al santuario My Son después de su ascensión al trono, con la intención de realizar una ceremonia para presentar ofrendas y construir nuevos monumentos.
La arquitectura de My Son destila la quintaesencia del Reino Champa y la combinación de técnicas arquitectónicas y artes decorativas de ese antiguo pueblo, dándole a los templos un aspecto majestuoso y, a la vez, misterioso.