En su intervención, Pham Minh Chinh afirmó que el cemento, el hierro y el acero son materiales de construcción esenciales para construir infraestructura técnica, obras civiles, obras industriales y aeropuertos, puertos, obras de defensa y seguridad, sistemas de infraestructuras urbanas y rurales, entre otros.
Subrayó que la industria enfrenta dificultades debido al aumento de los costos del combustible, la escasez de materias primas para la producción, la presión de la protección del medio ambiente, y problemas en los mecanismos de políticas, los mercados y la situación financiera.
Para que el sector se desarrolle de manera sostenible, promueva la eficiencia y haga contribuciones importantes al desarrollo socioeconómico, el premier destacó que es esencial implementar de manera efectiva la estrategia nacional de desarrollo de materiales de construcción para el período 2021-2030, con una visión hacia 2050, y el plan maestro de exploración, explotación, procesamiento y uso de recursos minerales para el período 2021-2030, con visión a 2050, junto con la aceleración del ritmo de inversión pública y viviendas sociales, obras de infraestructura urbanas, rurales, y otras para servir al desarrollo de la economía marítima, así como caminos rurales y rutas en áreas frecuentemente inundadas.
Señaló también la necesidad de aplicar en la producción los logros científicos, tecnológicos y de gestión, especialmente la cuarta Revolución Industrial; mejorar la calidad del producto; y diversificar productos de alta calidad y alto valor económico para satisfacer las necesidades de construcción.
Al mismo tiempo, es importante utilizar los recursos de forma económica y eficiente; ahorrar energía, materias primas y combustible en la producción; maximizar el uso de residuos de las industrias para el proceso productivo; y minimizar el impacto sobre el medio ambiente, resaltó.
El jefe del Gobierno instó a mejorar la capacidad de pronosticar los factores de influencia internos y externos para dar una respuesta proactiva y oportuna y apoyar a las empresas en la estabilización de su producción y la expansión de los mercados.
Se debe prestar atención a la búsqueda de formas de reducir las importaciones, mejorar la calidad de los productos y aumentar la competitividad de los productos nacionales, añadió.
Otras tareas incluyen invertir en la modernización de la tecnología para las fábricas de materiales de construcción existentes para reducir los costos de producción, ahorrar recursos naturales y proteger el medio ambiente.
Según el Ministerio de Construcción, en los últimos 10 años, la capacidad total de producción de materiales de construcción clave de Vietnam ha aumentado a alrededor de 120 millones de toneladas de cemento, 830 millones de metros cuadrados de baldosas, 26 millones de productos cerámicos sanitarios, 330 millones de metros cuadrados de vidrio de construcción, 20 mil millones de ladrillos de arcilla cocidos y 12 mil millones de ladrillos sin quemar cada año.
La calidad de los materiales de construcción vietnamitas cumple con los estándares internacionales. El nivel de tecnología y organización productiva y empresarial de la industria se sitúa entre los primeros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). Los ingresos anuales totales se estiman en casi 47 mil millones de dólares, lo que representa aproximadamente el 11% del PIB nacional.
Sin embargo, en los últimos años, la industria de materiales de construcción del país ha enfrentado muchas dificultades, como la disminución del consumo y de los ingresos, lo que ha provocado un estancamiento de la producción y las actividades comerciales y la pérdida de empleos, lo que afecta el desarrollo socioeconómico nacional.