Según Morisset, hubo señales positivas desde finales de 2021 y el diseño del Programa de Recuperación y Desarrollo socioeconómico 2022-2023 muestra que el Gobierno de Vietnam ha controlado la situación y está dispuesto a desplegar numerosas actividades en ese sentido.
Observó que la pandemia ha hecho que el país indochino acelere la transformación digital y el proceso de reforma para convertirse en una nación con ingresos medio altos en 2045.
Para lograr esta meta, enfatizó, la condición previa es que el Gobierno mantenga controlada la política fiscal y la economía no se encuentre cerrada por el Covid-19.
Señaló varios riesgos, como la reducción de las exportaciones debido a la ralentización de la economía mundial, sobre todo Estados Unidos y la Unión Europea, y la inflación de los costos de importaciones a raíz del posible aumento de los precios de los combustibles y sus efectos en el transporte de mercancías.
En este contexto, recomendó que Vietnam aproveche las oportunidades generadas de la economía verde, como el desarrollo de las energías limpias, y los factores favorables como trabajadores de bajo costo y los mecanismos de preferencias arancelarias para atraer inversiones de las empresas extranjeras.
Por su parte, Luke Hong, experto en economía sobre Vietnam del Instituto de Investigación de Macroeconomía de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) y tres socios (AMRO), afirmó que el motor principal de la economía vietnamita se centra en el sector de producción.
Si Vietnam tiene suficiente capacidad para prevenir la pandemia y mitigar las restricciones de movilidad, especialmente para las fábricas y trabajadores, este sector de Vietnam se beneficiará de la recuperación de la demanda externa, lo que ayudará a ampliar la escala de producción, enfatizó.
Otro motor principal es el sector de servicios que se prevé recuperarse cuando se flexibilicen las restricciones, junto con la aceleración de la vacunación masiva, añadió.
La fuerte recuperación de la producción y los servicios es la clave para alcanzar la meta de crecimiento de seis a 6,5 por ciento en 2022.
Según Luke Hong, Vietnam necesita evaluar las políticas de apoyo para las empresas micro, pequeñas y medianas para alcanzar su máxima eficiencia, además de acelerar el desembolso de inversiones públicas para la recuperación económica.
Además, es importante desarrollar las industrias auxiliares domésticas para fortalecer la participación de Vietnam en las cadenas de valor globales y mejorar el valor agregado de la economía.