Aunque los pedidos vuelven a aumentar, 2024 es un año desafiante para las empresas de este sector.
En los primeros meses de 2024 las exportaciones de textiles y prendas de vestir se recuperan en comparación al año pasado. Según estadísticas oficiales, en abril de 2024, el valor de las exportaciones textiles y de prendas de vestir alcanzó 3,15 mil millones de dólares, un aumento del 2,8% respecto al mismo período de 2023.
Las exportaciones de textiles y prendas de vestir de Vietnam superaron en el primer cuatrimestre del año los 12,5 mil millones de dólares, un 7,5% más que en igual lapso.
Truong Van Cam, vicepresidente de la Asociación de Textiles y Confecciones de Vietnam (VITAS), dijo que desde ahora hasta 2030, la industria textil pasará gradualmente de un enfoque de desarrollo rápido a un desarrollo sostenible basado en la transformación digital y el crecimiento verde.
Fábrica de fibras Hoa Xa, de la Corporación Textil Nam Dinh, una de las unidades líderes de la industria en la producción de hilados para los mercados nacionales y de exportación. (Fuente: VNA) |
Pham Van Viet, presidente de la junta directiva de la compañía Viet Thang Jean, explicó que para lograr este objetivo, las empresas deben centrarse en aplicar tecnologías avanzadas, mejorar la productividad y la calidad de los productos, y promover la fabricación de equipos originales.
En particular, la aplicación de la tecnología y la ciencia a los procesos de producción y la transformación digital se están convirtiendo en un requisito obligatorio para la industria textil y de la confección para que los productos puedan exportarse a mercados exigentes como Europa y América, donde existen requisitos muy altos para la ecologización de la producción.
Viet Thang Jean ha cambiado a la tecnología verde, que puede mejorar las actividades de producción y asociarse con la protección del medio ambiente.
En particular, Viet Thang Jean ha invertido en una línea de producción de 10 mil productos completos a un precio de 12,5 millones de dólares, ocho veces más que una línea normal.
Van Viet compartió que la empresa también aplica tecnología de corte automático, tecnología láser para crear efectos en las superficies de las telas, nanotecnología de teñido y tecnología de lavado turco. Estas máquinas y tecnologías modernas ayudan a Viet Thang Jean a obtener la certificación Oeko-Tex, un sistema independiente que verifica que no haya sustancias nocivas ni en textiles, ni en las fases de la fabricación de un determinado producto.
Las firmas de la cadena de suministro de textiles y prendas de vestir no son una excepción a esta tendencia. Actualmente, muchas empresas de materias primas están tratando de encontrar formas de reconvertirse a modelos de producción modernos, aplicando tecnología amigable con el medio ambiente y contribuyendo a aportar muchas ventajas a la hora de participar en la cadena de suministro global.
Sin embargo, para las pequeñas y medianas empresas, preparar fondos para invertir en fábricas y productos modernos, ecológicos, limpios y respetuosos con el medio ambiente es aún más difícil.
“Las empresas necesitan cambiar paso a paso y a largo plazo, para que la transición se produzca sin problemas. Con la volátil economía actual, la industria textil y de la confección necesita más tiempo del esperado para conseguir pedidos, aumentar los beneficios e invertir en tecnología para mejorar la eficiencia de la producción", expresó Van Viet.